Asesinan a José Enrique Roa Cruz, firmante de paz

De acuerdo con el partido Comunes, este múltiple asesinado sucedió en la zona rural del municipio de Pitalito, Huila.

Asesinan a José Enrique Roa Cruz, firmante de paz

Hasta un balneario del corregimiento de Guacacallo, zona rural de Pitalito, Huila llegaron integrantes de un grupo armado al margen de la ley disparando contra el esquema de seguridad del firmante de paz José Enrique Roa Cruz, con el fin de secuestrarlo.

En el hecho fueron asesinados Luis Eduardo Sterling Muñoz y Yilbert Silva Osorio, quienes eran funcionarios de la Unidad Nacional de Protección.

De acuerdo con el coronel William Javier Lara Avendaño, comandante del Departamento de Policía Huila, el pasado 14 de enero sobre las 6:00 de la tarde, en el balneario La Balastrera, ubicado en el corregimiento de Guacacallo, Pitalito, llegaron hombres que accionaron sus armas de fuego contra dos escoltas que custodiaban la seguridad del ex combatiente de la entonces guerrilla de las Farc.

Testigos afirmaron que el escolta Luis Eduardo Sterling Muñoz se percató de todo y forcejeó enfrentándose con los criminales, pero desafortunadamente al sufrir una caída le dispararon.  Al mismo tiempo mataron a su compañero Yilbert Silva Osorio e hieren en una pierna al protegido José Enrique Roa Cruz. Posteriormente los subieron a la camioneta blindada de la UNP junto con dos personas más hijos de un amigo del firmante de paz.

“Los delincuentes en su huida se llevaron a los dos escoltas malheridos y a tres personas más entre ellas al firmante del acuerdo de paz, kilómetros más adelante dos de estas 3 personas fueron dejadas en libertad menos el protegido firmante del proceso”, agregó el alto oficial.

Dos horas más tarde en la vereda La Maica, en jurisdicción del municipio de Oporapa, fueron hallados los cuerpos sin vida de Sterling Muñoz de 32 años y Silva Osorio de 34 años.

“En la vereda La Maica, en el cruce entre Saladoblanco y Oporapa, más hacía el suroccidente del departamento, encontraron a los dos funcionarios de la UNP asesinados previamente torturados y no se sabe aún del paradero del firmante de paz”, agregaron las autoridades huilenses.

Por su parte el vehículo fue dejado abandonado en la vía que de San Roque, conduce al municipio de La Argentina.

El Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz, Indepaz, precisó que, “José Enrique Roa Cruz era un firmante del acuerdo de paz que había sido acreditado desde el 05 de junio del año 2017 por la Oficina del Alto Comisionado para la Paz -OACP.

Además la organización humanitaria atribuyó el hecho al frente Ismael Ruiz del autodenominado Estado Mayor Central de las antiguas Farc-Ep, quienes presuntamente dispararon contra los dos escoltas y al protegido, cuyo cadáver después apareció en esta zona del sur del Huila.

“Se los llevaron con rumbo desconocido en su vehículo de protección. Los escoltas fueron encontrados asesinados y con signos de tortura. Posteriormente fue encontrado el cuerpo del firmante José Enrique Roa”, indicó Indepaz.

Frente a este tema se pronunció Tomás Ojeda, integrante de la mesa de paz de las disidencias de las Farc, “apreciada comunidad nacional e internacional de parte del bloque comandante Jorge Suárez Briceño, nos pronunciamos y rechazamos enérgicamente los hechos ocurridos en el corregimiento de Guacacallo, municipio de Pitalito, donde fueron interceptados por personas de la banda de los ‘Márquez’, un reducto de la Segunda Marquetalia, que aún opera en este departamento. Rechazamos categóricamente cualquier vinculación de nuestras estructuras a este hecho y como prueba y garantía los invitamos a hacer las verificaciones respectivas a las entidades nacionales e internacionales competentes, nos solidarizamos con las familias de los escoltas, les enviamos un sentido pésame, nosotros seguimos comprometidos con la paz con justicia social y Colombia y el mundo deben entender que la Segunda Marquetalia es una franquicia de varias bandolas que el señor Iván Márquez ha estado contactando para fortalecer un grupo criminal donde se le paga la militancia para que ejecuten actos como estos. Igual ocurre con los Comandos de Frontera en el Putumayo, con las Guerrillas Unidas del Pacífico, que no son ningunas guerrillas, son bandolas y ahora estos hechos en Pitalito, deben ser esclarecidos y tenidos en cuenta ante un eventual proceso con este grupo bandolero”.