Campesinos exigieron el fin de la guerra entre los elenos y las disidencias de las Farc
Las comunidades de Catumbo piden el fin de la guerra en esta zona del país.
Una marcha pacífica se adelantó en la mañana de este lunes 20 de enero en el corregimiento de La Gabarra, reuniendo alrededor de 300 personas que alzaron sus voces para exigir la paz en la región del Catatumbo.
La actividad contó con la participación de diferentes gremios locales, juntas comunales, concejales, la comunidad en general y representantes de las iglesias católica y cristiana, comerciante, en fin, la población civil en pleno pidiendo paz.
La concentración ciudadana tuvo lugar en el polideportivo local y todo de adelantó a partir de las 7:00 de la mañana, bajo el acompañamiento del corregidor de La Gabarra.
Mauricio Álvarez, presidente de Asojuntas de La Gabarra, se manifestó en representación de la comunidad y expresó la preocupación generalizada por la crisis que atraviesa la región por el conflicto armado.
“El panorama es complejo por el masivo desplazamiento de los campesinos, así como la zozobra de la confrontación, pero además por las familias que aún permanecen en sus casas, fincas y negocios, las cuales necesitan apoyo urgente debido a la falta de abastecimiento de alimentos”, denunció Álvarez con visible consternación.
Los enfrentamientos entre el ELN y las disidencias de las Farc en el Catatumbo han causado un deterioro alarmante de las condiciones de vida en la zona, dejando decenas de muertos y obligando a numerosas familias a abandonar sus hogares en busca de seguridad. Ante esta situación, la comunidad de La Gabarra unió fuerzas para enviar un mensaje claro: la paz debe prevalecer.
La marcha, además de ser un acto de resistencia pacífica, simbolizó la unidad de un pueblo que se niega a sucumbir ante la violencia. Los participantes hicieron un llamado urgente al Gobierno Nacional y a las instituciones internacionales para que adopten medidas que garanticen el bienestar y la seguridad en el Catatumbo.
Con camisas y banderas que clamaban por el fin de la violencia y oraciones lideradas por representantes religiosos, la jornada concluyó con un firme compromiso de los asistentes de continuar luchando por la tranquilidad y el desarrollo de la región.