Concejo de Popayán estudia reducción del impuesto de delineación urbana para impulsar la construcción formal
La administración municipal presentó un proyecto de acuerdo que busca disminuir tarifas del impuesto de delineación, otorgar exenciones a Juntas de Acción Comunal y regular cobros por nomenclatura. La propuesta fue respaldada por Hacienda y se encuentra en análisis técnico por los concejales.

En sesión ordinaria del 4 de junio, el Concejo Municipal de Popayán dio inicio al estudio del proyecto de acuerdo que modificaría parcialmente el Acuerdo 024 de 2021, con el objetivo de reducir las tarifas del impuesto de delineación urbana y fomentar la formalización de la construcción en la ciudad.
Contexto y razones del proyecto:
Según explicó la secretaria de Planeación, Jazmín Hurtado, la medida responde a una notable caída en los procesos de licenciamiento de obra, atribuida a los altos costos asociados a este impuesto. La funcionaria advirtió que esto ha derivado en un aumento de construcciones informales y desistimientos de trámite ante las curadurías.
“El impuesto de delineación urbana en Popayán es hasta diez veces más alto que en ciudades comparables como Ibagué o Pereira, especialmente para estratos 1 y 2”, señaló Hurtado. Por ejemplo, mientras en otras capitales se cobra entre 0 y 500 pesos por metro cuadrado en dichos estratos, en Popayán puede alcanzar hasta 4.941 pesos.
Puntos clave del proyecto:
- Reducción general de la tarifa del impuesto del 1.8% al 1%, con una tarifa diferenciada del 0.4% para Vivienda de Interés Social (VIS) y Vivienda de Interés Prioritaria (VIP).
- Exenciones para Juntas de Acción Comunal en trámites administrativos como certificados de nomenclatura, uso del suelo o radio de acción.
- Cobro escalonado del certificado de nomenclatura según el número de predios involucrados.
- Claridad sobre predios atípicos, permitiendo a Planeación certificar afectaciones parciales ante la negativa del IGAC de asumir esa función.
- Exenciones específicas para proyectos de parqueaderos públicos, obras en el sector histórico y reparaciones por actos terroristas.
Sustento fiscal y jurídico:
La secretaria de Hacienda, Juliana Sarmiento, respaldó la viabilidad fiscal de la propuesta. Argumentó que, aunque la tarifa se reduzca, el recaudo podría mantenerse o incluso incrementarse debido al efecto multiplicador del impuesto predial y una mayor formalización. El asesor jurídico Carlos Andrés Bolaños avaló la legalidad de la modificación, al tratarse de una actualización del estatuto tributario vigente.
Posturas del Concejo:
Durante la sesión, los concejales expresaron diversas inquietudes. Mientras varios respaldaron el enfoque social del proyecto y su impacto positivo en la generación de empleo, otros advirtieron sobre la necesidad de mayores controles para evitar que los beneficios recaigan únicamente en grandes constructoras.
Lucio Jurado, coordinador ponente, destacó que en 2023 el impuesto de delineación recaudó más de 2.600 millones de pesos, el pico más alto hasta ahora. Aseguró que se realizará un estudio detallado del impacto fiscal para garantizar sostenibilidad.
El concejal José Campo enfatizó que los constructores deben asumir responsabilidades como entregar vías pavimentadas y con servicios públicos adecuados. “No se trata solo de dar beneficios, también de exigir compromiso con la ciudad”, advirtió.
Debate en comisiones:
Se conformó una comisión conjunta entre las comisiones primera y segunda del Concejo, que comenzará mesas técnicas desde el lunes 9 de junio. En ellas se revisarán ajustes sugeridos, como limitar la vigencia de las exenciones, incluir fórmulas de actualización por IPC y garantizar mayor control sobre curadurías y desarrolladores.
Popayán atraviesa una desaceleración en el sector de la construcción y un aumento en la informalidad urbanística. Este proyecto de acuerdo busca reactivar el sector con tarifas más justas, pero también exige a las autoridades locales mayor control para evitar que los beneficios se traduzcan en evasión o crecimiento desordenado.