¡Dejen de idealizar hijueputas de izquierda y de derecha!
Por: Carlos Salas

Me estrené como columnista hace unos días con una nota que intentaba explicar la diferencia entre democracia y política. ¡Y, MK! Me cayeron como aves de rapiña, destruyendo cualquier idea pedagógica.
Trataba de explicarles a mis lectores que durante 200 años en Colombia, en la cancha de fútbol de la política, siempre ha habido un solo equipo, sin oponentes. Once jugadores recibiendo miles de millones de pesos cada vez que el balón entraba a la otra cancha.
“La presidencia se la pasa al senador… el senador se la pasa a la gobernación… la gobernación a los diputados… los diputados a los alcaldes… los alcaldes a los concejales… ¡y goooooolllll!”.
La gran mayoría ni siquiera entiende la diferencia entre ediles, concejales y diputados. Pero se hacen matar por el “dotor”.
¡Parce, nos han robado siempre! Porque no somos conscientes de que tenemos que ponernos de acuerdo para entrenar y que no sea como un partido entre Millonarios y el Real Madrid. Perdón por los hinchas del Millos.
Este es el primer partido de democracia en Colombia, es la primera vez en nuestra historia que entra al juego un equipo a tratar de hacer lo que pueda para evitar la goleada más desastrosa que nos han metido siempre.
Pero claro, como pasa en el primer partido de un grupo de novatos, lo están haciendo pésimo el Pacto lo está haciendo pésimo. No hay buenos defensas, los delanteros son lentos y sin preparación, no saben cómo avanzar con el balón. Y no falta el hijueputa torcido, corrupto, ladrón que ha soñado con hacerse millonario con nuestra plata, y cambia de partidos políticos como cambiar de calzoncillos.
¡Que les esté tratando de explicar esta idea tan obvia no significa que esté defendiendo las embarradas tan asquerosas que han cometido en el Gobierno del Cambio! Les estoy tratando de explicar por qué debemos seguir entrenando más equipos entre todos nosotros para que entren al partido y defiendan la cancha del pueblo, para que los hijueputas corruptos dejen de meterse en política.
Ahh pero llegan las elecciones, los de siempre se van a las veredas a los pueblos ya las invasiones a aprovecharse del hambre y la necesidad de los menos favorecidos y quienes no tienen el privilegio de leer y entender este mierdero. Y los ilustrados en política dicen “Yo no voto”. Entendamos que votar a consciencia es defender a los más débiles.
Parceras y parceros, démonos cuenta de que esta pelea tan pendeja solo les favorece a los de siempre. Superemos tanta basura que nos han metido en la cabeza y comencemos a formar un equipo de gente honesta y trabajadora para entrar a la cancha y tratar de detener tanta corrupción en nuestra tierra.
Del Gobierno del Cambio estoy escribiendo un libro; cuando lo lean, me sacrifican lo que quieran. Mientras tanto, dejen a mi mamita tranquila.
Somos pueblo, nosotros mandamos.
Les quiero.