¿Desespero o mala gestión? La cuestionable contratación de la Secretaría de Deportes de Popayán
La Alcaldía de Popayán, bajo el liderazgo de Juan Carlos Muñoz Bravo, se encuentra nuevamente en el ojo del huracán.
Por: Alexander Casas Prado
En esta ocasión, la Secretaría de Deportes liderada por el licenciado en educación física, Luis Felipe Sánchez Burbano ha anunciado un proceso de mantenimiento de escenarios deportivos por más de 700 millones de pesos. Aunque a primera vista parece una inversión necesaria para el desarrollo deportivo de la ciudad, un análisis detallado revela serias inconsistencias que no pueden pasar desapercibidas.
El contrato en cuestión establece un plazo de ejecución de tres meses. Sin embargo, considerando los trámites administrativos y el tiempo restante de la vigencia fiscal, al contratista le quedarían menos de 15 días para iniciar y completar las obras. Esta situación plantea serias dudas sobre la viabilidad del proyecto y la planificación por parte de la administración municipal.
Además, surge la inquietud de que se esté intentando aplicar un "mico jurídico" al buscar adicionar un plazo mediante la generación de una reserva inducida. Este tipo de maniobras no solo podrían constituir una falta disciplinaria, sino que también reflejan una falta de transparencia y responsabilidad en el manejo de los recursos públicos.
Otra interrogante importante es la competencia sobre estas actividades. Tradicionalmente, el mantenimiento de escenarios deportivos ha sido responsabilidad de la Secretaría General. ¿Por qué entonces se está gestionando desde la Secretaría de Deportes? ¿Se está intentando disfrazar este proceso bajo otra denominación para eludir procedimientos o controles establecidos?
El hecho de que el proceso deba ser subido al SECOP hoy antes de las 7 de la noche añade un elemento de urgencia que resulta, cuanto menos, sospechoso. La premura no debe ser excusa para obviar los procedimientos legales y administrativos que garantizan la transparencia y eficiencia en la contratación pública.
Es fundamental que las autoridades competentes tomen cartas en el asunto y esclarezcan estas irregularidades. La ciudadanía de Popayán merece una administración que actúe con responsabilidad, transparencia y en estricto apego a la ley. No podemos permitir que acciones precipitadas o malintencionadas perjudiquen el desarrollo y bienestar de nuestra comunidad.
Es momento de reflexionar sobre las prácticas administrativas actuales y exigir rendición de cuentas. Solo así podremos avanzar hacia una gestión pública más eficiente y honesta que realmente responda a las necesidades de todos los payaneses.