El consejo: cómo blanquear la ropa blanca para que esté impecable
Estrategias muy simples y a la mano para quienes desean recuperar la apariencia de sus prendas cuando por el descuido empiezan a verse muy mal.
En cualquier armario hay prendas blancas, ya que combinan con prácticamente todo. Sin embargo, tienen un gran inconveniente. Y es que poco a poco van amarilleándose o poniéndose grisáceas, por lo que su vida útil se reduce de manera significativa. No obstante, existen algunos trucos con los que podemos conseguir que recuperen su color original y queden como nuevas.
No es necesario usar límpido para que una prenda blanca recupere su color. La organizadora profesional Pepa Tabero lo hace con percarbonato de sodio, un limpiador en polvo con base de oxígeno que puedes encontrar en el supermercado.
Añade dos cucharadas a un recipiente con unos dos litros de agua caliente y 100 ml de zumo de limón antes de sumergir la ropa y remover, lo que creará una espuma.
Unos 15 minutos después de que esta desaparece, las prendas se retiran y se lavan en la lavadora.
Otro trunco: Pon la prenda que quieras blanquear en un recipiente y échale un litro de agua, un cuarto de taza de agua oxigenada y chorro de amoniaco y déjalo reposar unos 20 minutos. Aquí conviene no dejarlo mucho tiempo porque la mezcla puede estropear los tejidos a la larga.
Una vez que hayas hecho esto, mete la prenda en la lavadora y haz un ciclo corto para eliminar olores y después, si tienes la posibilidad, seca la prenda al sol para que el efecto del prelavado sea mucho más potente.
Este remedio debería resultar a la primera pero, si no es así, puedes repetir el proceso.