El ELN confesó que fue la responsable de la masacre en Campo Tres
Las víctimas serían oriundas del municipio de El Tarra, Norte de Santander.

En un comunicado de prensa emitido por las redes sociales la noche del domingo 27 de abril, los integrantes del frente de Guerra Nororiental del Ejército de Liberación Nacional, ELN, se atribuyó la muerte de las tres personas cuyos cadáveres aparecieron en la zona rural del corregimiento Campo Tres, de Tibú.
Según manifiestan los guerrilleros, en la mañana del día anterior, chocaron con unidades del frente 33 de las disidencias de las Farc, quienes supuestamente abrieron fuego sin mediar palabra, producto del fuego cruzado abaten a alias "Yorbey", y a las dos mujeres.
Según dicen, ellos mismos llevaron los cuerpos sin vida hasta Campo Tres para facilitar las labores de las autoridades, y entregaron a los dos una de las mujeres a un líder social, quien estará encargado de hacerlos llegar a la familia.
Lo concreto es que nadie sabe con certeza cómo fueron los momentos finales de la vida de las tres personas que fueron halladas muertas en el corregimiento Campo Tres, de la zona rural del municipio de Tibú. Dos mujeres, identificadas como Camila Guillen Delgado y Yelitza Tatiana Guillen Ramírez, además de un hombre, quien sería el esposo de Tatiana.
Fue sobre las dos de la tarde del pasado sábado 26 de abril, cuando entre los habitantes del municipio empezó a correr el rumor de tres muertos en este corregimiento del Catataumbo, momentos después, sus familiares confirmaron lo que más se temía, tres muertos y una escena del crimen macabra.
Camila, de camiseta blanca, tenía la parte abdominal baja cubierta en sangre. Tatiana, de camiseta roja, se había desangrado en la tierra, de su espalda y cara provenía bastante sangre. Mientras el hombre, es el caso más confuso, fue encontrado en ropa interior.
En el estómgo y manos tenía manchas leves, mientras que en las extremidades inferiores aparenta tener un torniquete improvisado en su pierna derecha, donde se notaba abundante sangrado, de igual forma en muslo, tobillo y rodilla tenía trozos de tela amarrados. Y lo más llamativo, un catéter intravenoso sobre su brazo izquierdo.
Según los pobladores de la zona, las jóvenes serían oriundas de El Tarra, y se estaban desplazando en bus hasta ser interceptadas por un grupo armado ilegal, quien las habría masacrado. Tatiana era madre de 2, sus hijos habrían sido bajados del bus, y según se comenta, habrían sido entregados a la comunidad campesina del lugar.
Esta versión no ha sido confirmada por las autoridades, por la dificultad de acceso hacia la zona. De igual forma, el levantamiento tuvo que ser hecho por terceros y la investigación permanece a la distancia, a cierre de esta edición, no han emitido información oficial sobre el caso.