El papá de Wilmary Carolina Guerra Montilla la encontró muerta después de dos años de búsqueda

El caso de esta joven venezolana tiene un nuevo capítulo. Con el hallazgo del cuerpo, se busca al principal sospechoso.

El papá de Wilmary Carolina Guerra Montilla la encontró muerta después de dos años de búsqueda



La migración de venezolanos ha sido una de las más grandes en los últimos años, obligando a muchos ciudadanos a llegar a otras ciudades de diferentes países del continente en busca de mejores oportunidades de vida.

La historia de la venezolana Wilmary Carolina Guerra Montilla en Colombia, arrancó el 18 de septiembre de 2023, cuando arribó hasta el municipio de Malambo, Atlántico.

Sin embargo, su vida llegó a su fin en una tragedia, lo que obligó a Wilmer Guerra, su papá, viajar desde el vecino país para saber cómo ocurrió su fallecimiento.

La mujer, de 32 años de edad, le había compartido a sus amigas una serie de videos, en los cuales mostraba la finca en la que ella pasaba sus días, pero esta vez en Manatí.

Las imágenes fueron ficha clave para que su padre se convirtiera en un investigador y así pudiera encontrar el cuerpo de Wilmary.

De acuerdo con información de las autoridades, la fallecida había salido de su vivienda en Malambo hacia una finca sin que se conociera su destino exacto.

"Contabilicé 600 días, 20 meses buscando a mi hija y yo me decidí a no devolverme hasta que la consiguiera", indicó Wilmer a los medios de comunicación de la costa atlántica.

En uno de los vídeos que Wilmary Carolina compartió a sus familiares se pudo apreciar cómo la mujer decía estar en una "finca, con unas hermosas vacas". El espacio que ella les mostraba parecía ser demasiado grande y lleno de campo y monte.

La venezolana, sin saber que la asesinarían, había compartido otros videos en los que decía: "Me vine a pasar dos días".

La vida de esta mujer de 32 años de repente se había apagado. La zozobra y ansiedad para la familia de ella se había apoderado, pues ninguno tenía certeza del paradero de la supuesta finca que ella le mostraba a los familiares.

Un año y ocho meses después de aquella extraña desaparición, su padre, Wilmer Guerrera, se convirtió en un investigador profundo, y en compañía de las autoridades lograron dar con el paradero del sitio en donde el cuerpo de su hija había sido enterrada.

Lo que genera más interrogatorio en el encuentro del cadáver, es que quién fue el responsable de acabar con la vida de esta migrante. Sin embargo, uno de los sospechosos sería su compañero sentimental.

"La encontré en una finca donde trabajaba el hermano de su expareja. Él era el dueño de esa finca. La expareja de mi hija la llevó para allá. Me imagino que ya tenía pensado lo que quería hacer. Llegó y ese mismo día la mató", agregó Wilmer, el comungido padre.

Ahora, la Fiscalía General de Nación y también Wilmer Guerra buscan por todo el Atlántico a Franklin Jesús Trillos Yance, la expareja sentimental de esta mujer, para que rinda cuentas y esclarezca lo sucedido en aquella finca al sur del departamento.