El precio de la vivienda VIS y VIP registra un alza acumulada histórica del 48,6% en el actual periodo de gobierno

Un reciente análisis económico basado en cifras del Banco Popular y el Banco de la República ha encendido las alarmas en el sector inmobiliario y en los bolsillos de los colombianos. Durante el actual periodo de gobierno del presidente Gustavo Petro, el aumento acumulado en los precios de la vivienda de Interés Social (VIS) y Prioritario (VIP) ha alcanzado un 48,6%. Esta cifra marca un hito estadístico al romper la tendencia de estabilidad relativa que se mantuvo durante las administraciones de Álvaro Uribe, Juan Manuel Santos e Iván Duque, donde las variaciones oscilaron entre el 18% y el 25%.

Un salto sin precedentes en el costo habitacional
La gráfica, elaborada con datos del sistema financiero, muestra una disparidad notable en la variación porcentual acumulada de los precios. Mientras que en gobiernos anteriores el crecimiento de los precios se mantenía en un rango controlado, con un pico máximo del 25,6% durante el mandato de Iván Duque, la administración actual enfrenta una escalada que casi duplica los registros históricos.

En términos monetarios, el impacto es contundente. Según la gráfica de referencia:

• Gobierno Petro: El aumento en valor para vivienda VIS se estima en $78,3 (unidades de valor/millones), y $52,2 para VIP.
• Gobierno Duque: El aumento fue de $29,5 para VIS y $19,7 para VIP.
• Gobierno Santos 2: Registró $22,3 en VIS y $14,9 en VIP.
  Comparativo histórico por periodos
  Para entender la magnitud del fenómeno actual, es necesario revisar el comportamiento del mercado en las últimas dos décadas:
• Uribe 1 (2002-2006): Variación del 22,8%.
• Uribe 2 (2006-2010): Variación del 24,0%.
• Santos 1 (2010-2014): Registró la variación más baja con un 18,3%.
• Santos 2 (2014-2018): Repunte al 24,5%.
• Duque (2018-2022): Cierre con un 25,6%.
• Petro (Actual): Disparo al 48,6%.
  Factores detrás del incremento
  Aunque la gráfica presenta el dato "crudo", analistas del sector sugieren que esta tormenta perfecta obedece a una combinación de factores macroeconómicos y políticos:
• Inflación y costos de construcción: El encarecimiento global del acero, el cemento y otros insumos.
• Tasas de interés: El Banco de la República mantuvo tasas altas para controlar la inflación, encareciendo el crédito constructor e hipotecario.

Cambios en subsidios: Las modificaciones al programa Mi Casa Ya y la incertidumbre regulatoria han impactado la oferta y la estructura de costos de los proyectos.

Para una ciudad intermedia como Popayán, donde la clase media y trabajadora depende en gran medida de los subsidios y los topes VIS para acceder a casa propia, este aumento del 48,6% significa que las familias deben endeudarse más o ahorrar por más tiempo para adquirir los mismos metros cuadrados que hace cuatro años. La brecha para alcanzar el cierre financiero se ha ensanchado, poniendo en riesgo el sueño de vivienda de miles de caucanos.

El sector de la construcción, representado por gremios como Camacol, ha reiterado la necesidad de políticas de reactivación urgentes. Si bien el gobierno nacional ha anunciado medidas para impulsar el crédito, la inercia de los precios altos en la vivienda VIS y VIP plantea un desafío social mayúsculo: evitar que la vivienda digna se convierta en un lujo inalcanzable.
Desde Periódico Virtual.com, seguiremos monitoreando cómo estas cifras macroeconómicas se traducen en la realidad de los proyectos habitacionales en el departamento del Cauca.

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