¿El Salvador rumbo a una dictadura? Congreso aprueba reelección indefinida

La reforma fue avalada por 57 de los 60 diputados, la mayoría afines al presidente Nayib Bukele, quien no se ha pronunciado oficialmente sobre el cambio.

¿El Salvador rumbo a una dictadura? Congreso aprueba reelección indefinida

Por una abrumadora mayoría, el Congreso de El Salvador aprobó este jueves una controvertida reforma constitucional que abre la puerta a la reelección presidencial indefinida, extiende el período presidencial de cinco a seis años y elimina la segunda vuelta en las elecciones.

La reforma fue avalada por 57 de los 60 diputados, la mayoría afines al presidente Nayib Bukele, quien no se ha pronunciado oficialmente sobre el cambio.

Además de permitir la reelección ilimitada, la medida acorta el actual mandato presidencial, por lo que Bukele, reelegido en 2024, concluiría su gestión el 1 de junio de 2027, cuando se convocarían elecciones presidenciales concurrentes con las legislativas y locales.

Reacciones encontradas

La diputada oficialista Ana Figueroa defendió la reforma asegurando que busca “darle el poder total al pueblo salvadoreño” y garantizar “estabilidad política y jurídica”.

Sin embargo, desde la oposición se denunció un grave retroceso democrático. La legisladora Marcela Villatoro, del partido VAMOS, levantó en plena sesión un cartel que decía “este día murió la democracia”, y criticó que la reforma se haya aprobado “sin consulta, de forma burda y cínica”.

A su vez, la congresista Claudia Ortiz, también de VAMOS, afirmó que la medida busca “perpetuar a un pequeño grupo en el poder”.

Riesgos para la democracia

La reelección indefinida, advierten expertos y organismos internacionales, representa un riesgo para la alternancia en el poder y puede deteriorar la democracia.

En 2024, Bukele fue reelegido con más del 82 % de los votos, a pesar de que la Constitución salvadoreña prohibía expresamente un segundo mandato consecutivo. Esto fue posible gracias a una interpretación de la Sala de lo Constitucional, dominada por jueces cercanos al oficialismo.

Organizaciones de derechos humanos como Human Rights Watch han criticado duramente el proceso, comparándolo con lo ocurrido en Venezuela, y denunciaron que el país vive una creciente represión contra voces críticas.

“El día antes de las vacaciones, sin debate y en una sola votación, cambiaron el sistema político”, dijo Noah Bullock, de la organización Cristosal.

Seguridad con mano dura

Desde 2019, Bukele ha impulsado una férrea política de seguridad que, bajo un estado de excepción permanente, ha permitido la captura de decenas de miles de personas supuestamente vinculadas con pandillas. El país ha reducido sus tasas de homicidio drásticamente, pero enfrenta críticas por violaciones a los derechos humanos, detenciones arbitrarias y falta de juicios justos.

Bukele ha respondido a las críticas con contundencia:

“Prefiero que me llamen dictador a ver cómo matan a los salvadoreños en las calles”, expresó en un discurso a comienzos de año.

Lo que sigue

Aunque la reforma ya fue aprobada en primera instancia, aún requiere ser ratificada por la siguiente legislatura. Sin embargo, con la amplia mayoría oficialista, se espera que su entrada en vigor no encuentre obstáculos.