Elías Larrahondo dejó a Popayán sin soluciones: La Variante Oriente, solo un sueño
El 29 de enero de 2021, el entonces gobernador del Cauca, Elías Larrahondo, prometía una solución a los grandes problemas de movilidad de Popayán: la variante Oriente.
Un proyecto que, según él, descongestionaría la ciudad desviando los camiones provenientes del sur y el Huila. Con la fase 3 de los estudios y diseños aprobada con recursos de regalías del Departamento, Larrahondo aseguraba que Popayán también haría su respectivo aporte. Sin embargo, a casi tres años de ese anuncio, la realidad es otra.
En noviembre de 2023, Larrahondo, a través de su secretario de Infraestructura, José Rodrigo Astaiza, lanzó un impresionante video en el que aseguraba que “Popayán es uno de nuestros 42 motivos para avanzar” y mostraba el trazado de la variante Oriental como una obra que transformaría la movilidad de la ciudad. Sin embargo, hoy, al escuchar en una entrevista radial al actual secretario de Infraestructura del Departamento del Cauca, Edwin Lasso Zapata, declarar que no hay recursos económicos para la construcción de esta obra y que se requiere el apoyo de las fuerzas vivas del departamento, queda claro que todo lo prometido se ha quedado en el aire.
Es triste ver cómo las expectativas se desploman cuando la realidad golpea: la falta de unidad entre las fuerzas vivas del Cauca, y más aún, la incapacidad de la clase política para anteponer los intereses generales. Mientras en departamentos como Antioquia y el Valle del Cauca, sus congresistas trabajan en conjunto por el bienestar de sus territorios, en el Cauca la división impera, y con ella, la inacción.
Popayán, una ciudad de puertas abiertas, que recibe a todos sin excepción, sigue esperando reciprocidad de sus gobernantes de los lideres políticos y sociales. Una ciudad resiliente que diariamente enfrenta los retos de acoger a personas desplazadas por la violencia, incluso a extranjeros. Pero a pesar de su nobleza, ha sido tratada con indiferencia. Los gobernantes han fallado, y eso debe reflejarse en las urnas. En las próximas elecciones, Popayán debe castigar a quienes fueron indiferentes a su dolor, a quienes no hicieron nada por ella.
Es hora de que tomemos conciencia, de que sintamos orgullo por esta tierra y que juntos exijamos que Popayán sea prioridad. Aún hay esperanza. Bajo la administración de Juan Carlos Muñoz, un hombre decente y comprometido, podemos aspirar a que Popayán recupere el lugar que merece. Es momento de unirnos, de luchar por el bien común y de no permitir que esta ciudad siga siendo una promesa incumplida.
Es momento de que el actual gobernador, Octavio Guzmán, tome las riendas y corrija los errores de su antecesor, demostrando que Popayán no puede seguir siendo una promesa incumplida. Junto al alcalde Juan Carlos Muñoz, tienen la oportunidad histórica de unirse para darle una mano amiga a esta ciudad que, aunque ha sido golpeada y olvidada, nunca ha dejado de brindarnos su riqueza, su cultura y su acogida. Popayán, una ciudad resiliente que lo ha dado todo, merece ser prioridad. Este es el momento de trabajar en conjunto para devolverle la dignidad y el desarrollo que tanto necesita y que su gente espera con esperanza