Exjefes paramilitares renuncian a la condición de gestores de paz por desacuerdos con Otty Patiño y asistente
Un grupo de 16 exjefes de las AUC, encabezados por Salvatore Mancuso, anunciaron en una carta dirigida al presidente Petro que suspenden sus labores como gestores de paz.

Las diferencias entre 16 exparamilitares y el alto comisionado para la paz, Otty Patiño, hicieron que renunciaran a la gestoría de paz en la que fueron designados a finales de noviembre del 2024.
El presidente Gustavo Petro los había investido con esta figura para hacer un “proceso de cierre” del acuerdo de Ralito.
De acuerdo con la versión a personas cercanas a los gestores, la renuncia se debe a que Patiño, su mano derecha, María Paz Lara, y el jefe negociador con el Clan del Golfo, Álvaro Jiménez, se opusieron al espacio de mesa de negociación para reabrir el proceso de negociación con las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC.
Con esta determinación, la gestoría de paz se queda sin representantes de las Autodefensas. Eran 18 exjefes paramilitares los que se habían nombrado en ese entonces y dos ya habían renunciado en los pasados meses, Ramón Isaza y Hebert Veloza García, alias 'H.H'.
Ahora renunciaron el resto de designados: Arnubio Triana Mahecha, alias 'Botalón'; Héctor José Buitrago Rodríguez, alias 'El Patrón'; Ramiro Vanoy Murillo, alias 'Cuco' Vanoy; Hernán Giraldo Serna, alias 'el señor de la Sierra'; Luis Eduardo Cifuentes Galindo, alias el Águila; Manuel de Jesus Pirabán, alias Pirata; Juan Francisco Prada Márquez, alias Juancho Prada; José Baldomero Linares Moreno, alias Guillermo Torres; Salvatore Mancuso Gómez; Carlos Mario Jiménez Naranjo, alias 'Macaco'; Diego Fernando Murillo Bejarano, alias 'Don Berna'; Rodrigo Tovar Pupo, alias 'Jorge 40' ; Rodrigo Pérez Alzate, alias 'Julián Bolívar'; Fredy Rendón Herrera, alias 'El Alemán'; Edwar Cobos Téllez, alias 'Diego Vecino'; y Héctor Germán Buitrago Parada, alias Martín Llanos.
En una carta dirigida al presidente de la República Gustavo Petro, los exparamilitares comunican la decisión y dejan ver que suspenden la relación con la oficina de Patiño, a la que señalan de "insubordinación" frente a las órdenes presidenciales.
"Los suscritos, excomandantes de las Autodefensas Campesinas de Colombia, nombrados por el gobierno que usted preside como Gestores de Paz mediante la resolución 453 de 8 de noviembre de 2024, nos dirigimos a Usted con el mayor respeto para comunicarle nuestra decisión de suspender el encargo conferido, ponerlo a su entera disposición y, en consecuencia, suspender las relaciones con la Oficina del Consejero Comisionado para la Paz (OCCP)", se lee.
Y agregan en la comunicación escrita: "Esta determinación, obedece al reiterado incumplimiento de los compromisos por parte de la OCCP. La realidad demostró que estas designaciones en la práctica se convirtieron en un gesto meramente simbólico, puesto que la OCCP jamás tuvo la intención ni compromiso real para materializarlas, los incumplimientos reiterados, dilaciones sistemáticas, la lesiva falta de transparencia, y la abierta insubordinación frente a sus órdenes presidenciales directas y públicas, la falta de gestión efectiva y voluntad política por parte de dicha oficina han minado la confianza, haciendo imposible continuar ejerciendo nuestras gestorías de forma eficiente y digna".
De acuerdo con los exparamilitares, en reunión con la delegación de la OCCP, el 4 de mayo de 2024, se discutieron y acordaron entre las partes punto como la instalación de la mesa para el cierre de Ralito, el seguimiento al cumplimiento de los acuerdos allí acordados, y la necesidad de ponerle punto final a la Ley 975 de Justicia y Paz.
"Pese a que Otty Patiño y Álvaro Jiménez, se comprometieron y anunciaron la instalación de la mesa para el día 20 de mayo del 2024 como fecha límite, la pospusieron y fijaron como plazo improrrogable el 4 de junio de 2024, la OCCP lejos de honrar su palabra, no solo incumplió el compromiso sino que, de manera unilateral y sin explicación, decidió cambiar el enfoque de la gestoría y negar rotundamente la posibilidad de instalar la mesa de cierre de Ralito tal y como lo había anunciado públicamente usted, señor Presidente", denunciaron los exparamilitares.
Ya al final de la comunicación escrita, solicitan una reunión con el jefe de Estado colombiano, "en la fecha, hora y lugar que considere conveniente, con el propósito de continuar avanzando en los caminos de reconciliación y en la consolidación de la paz que usted ha liderado".
Con una carta de dos páginas, los 18 exjefes paramilitares designados como gestores de paz habían aceptado el nombramiento hecho por el presidente Gustavo Petro. La misiva estaba firmada por cada uno de ellos, incluidos los que estaban extraditados en los Estados Unidos.
"Queremos expresar nuestra aceptación al nombramiento en calidad de gestores de paz tal y como ha quedado consignado en la resolución 453 del 8 de noviembre de 2024", reza la carta, en la que los exlíderes paramilitares aseguraron que se sumaban "a la agenda de paz que usted lidera e interpreta, señor presidente".
Los voluntarios gestores de paz señalaban que mientras el mundo se abre paso entre conflictos y una fuerte amenaza nuclear, "la voluntad mayoritaria del pueblo colombiano es transitar a una Colombiana próspera y en paz".
Bajo esa perspectiva, indicaron que es complejo buscar la paz "con tantos y tan diversos actores armados", sobre todo al lidiar con tantas "particularidades, intereses y contextos territoriales".
En esa línea asumieron la tesis de que están en un "proceso inconcluso" y que el objetivo será "ajustarlo y suscribirlo". En esa misma lógica celebraron que sería el único proceso dentro de la 'paz total' que actualmente no está mediado por las armas: "eso eleva a una categoría honrosa".