Gasolina ilegal en el Cañón del Micay: Gobierno refuerza controles y cierres de estaciones
El Ministro de Defensa reveló que la gasolina la compran en Yumbo, Valle del Cauca y la llevan clandestinamente al Cañón del Micay.

El ministro de Defensa, Pedro Sánchez, compareció ante la Comisión Segunda de la Cámara de Representantes, donde destacó los esfuerzos del Gobierno Nacional para recuperar el control territorial en el Cañón del Micay, en Argelia, Cauca.
Durante su intervención, el funcionario señaló que el tráfico ilegal de gasolina es un factor clave en la financiación de los grupos armados en la región.
El ministro explicó que, junto con el Ministerio de Minas y el Ministerio de Justicia, se está evaluando la situación de las estaciones de gasolina en el suroccidente del país.
En el departamento de Nariño, por ejemplo, el 45 % de estas estaciones no cuentan con los permisos requeridos, lo que ha llevado a considerar su cierre definitivo.
"Si una estación de servicio no tiene el permiso del Ministerio de Minas y Energía, se cierra", afirmó Sánchez, advirtiendo que no se permitirán prácticas ilegales en la distribución de combustible.
Además, detalló que gran parte de la gasolina proviene de Yumbo, Valle del Cauca, y es desviada hacia Nariño, desde donde ingresa clandestinamente al Cañón del Micay a través del corredor del Estrecho.
Sanciones y bloqueos a vehículos sospechosos
El gobierno ha determinado que cualquier vehículo que sea detectado desviando combustible hacia zonas controladas por grupos armados enfrentará sanciones inmediatas.
Asimismo, las estaciones de servicio implicadas en estas operaciones ilegales serán cerradas sin contemplaciones.
El ministro comparó la estrategia con la política implementada en Singapur hace décadas, subrayando la necesidad de decisiones firmes para erradicar estas prácticas ilícitas. "Si queremos cambiar esta realidad, debemos estar preparados para asumir medidas drásticas", concluyó.
Las autoridades continúan fortaleciendo las acciones para frenar el tráfico ilegal de combustible en la región, con el objetivo de debilitar el accionar de los grupos armados que operan en el Cañón del Micay.