Un pasaje por mi vida…

Han pasado 48 años y este recorrido lo recuerdo cómo el primer día.

Un pasaje por mi vida…

Mi padre me pidió un día que lo acompañara a rodear unas veredas en el municipio de Morales, en el Cauca, lugar en donde su empresa construía un proyecto de electrificación rural. Él, un ingeniero eléctrico de la Universidad Industrial de Santander, había llegado al departamento por allá en el año 1970, como parte de un grupo de profesionales que sumarían, para ese entonces, la nómina de CEDELCA SA. Inicialmente se estableció en Santander de Quilichao, con mi madre, una bumanguesa de raca mandaca. Allí nació mi hermano, Jorge, un hombre íntegro, estudioso y gran trabajador, hoy Economista y gran Médico.

Tendría yo tal vez unos diez años, cuando en compañía de mi padre, transitaba ya por esas bellas montañas Caucanas, mientras Colombia atravesaba por una profunda crisis, producida por el creciente poder del narcotráfico y el debilitamiento del proceso de paz con el M-19.

Recuerdo que en medio de aquellas correrías pensaba sobre nuestra llegada a Popayán, mi origen en el barrio Modelo y nuestro paso fugaz por el hermoso lugar que nos acogió durante los primeros dos o tres años de vida. Mi padre había sido trasladado desde Santander a esta bella ciudad, la cual sería nuestro amado refugio familiar durante los siguientes 48 años.

En 1978 el Instituto de Crédito Territorial nos permitió adquirir nuestra primera vivienda propia familiar, ubicada en el barrio Palacé, una maravillosa casa esquinera que nos acogería durante casi 22 años. Aquellos fueron “Mis años maravillosos”; una niñez alegre, un barrio acogedor, hogareño y de bonitas costumbres. Recuerdo especialmente las épocas navideñas al son de las chirimías, la banda de los huevos, los torpedos, las novenas, las chispita mariposa...

¡Incomparables! Qué épocas bellas. Inicié muy pequeño mi vida académica, haciendo tránsito por el jardín infantil Montesori, del cual salté rápidamente hacia el colegio Champagnat. Fueron 12 gratificantes años de estudio en esta fascinante institucióndesde Kinder hasta Once, tiempo durante el cual conocí a las mejores personas. Aún nos vemos, nos hablamos, nos acordamos.

El resto de la historia es un barco de papel en una corriente de agua. Seguí los pasos de mi Taita, me gustó siempre ese tema de la energía; y fui tras sus huellas, recorriendo camino por trocha Caucana, llevando ese destello de luz a sitios cada vez más recónditos para iluminar los rostros de cientos de paisanos que querían verla antes de partir. 

Pero todo no podía ser trabajo. Joven, con unos pesos en los bolsillos y progresando llegaba la esperanza de construir familia con la bendición de Dios. Conocí una hermosa mujer, Diseñadora Gráfica de la Universidad del Cauca, amorosa y detallista que me cautivó en un dos por tres. Claudia, mi amada e incondicional compañera de vida. Junto a ella nuestra vida tomó un nuevo color. Llegaron con el tiempo nuestros anhelados hijos, Mateo y Maria Antonia a quienes les pedí un día que me acompañaran a rodear unas obras que nuestra empresa construía en Popayán relacionados con proyectos de energía, guiados de la mano de un gran abuelo.

¿De qué nos pegamos...?

Son 25 años de trabajo, principalmente en el sector energético. Comencé gestionando y dirigiendo proyectos de infraestructura, enfocándome especialmente en la planificación estratégica y el uso eficiente de los recursos económicos. Durante los últimos 15 años concentré mi actividad empresarial en Popayán creando y dirigiendo empresas del sector de la construcción, del sector comercial y en la generación de energía con fuentes renovables.

Durante los últimos cuatro años hemos venido construyendo un modelo de empresa social en donde enfocamos los esfuerzos de responsabilidad social como un mecanismo de fortalecimiento y desarrollo económico para cientos de ciudadanos.

Ahora doy un nuevo paso hacia la búsqueda de bienestar. Quiero hacer algo por la ciudad que me ha dado todo lo que soy. No me interesa llegar a la Alcaldía por un asunto de esencia política. Mi objetivo es gestionar para que nuestra ciudad y su gente crezcan, para que con nuestra gestión se genere desarrollo y prosperidad, con resultados visibles. Aspiro a que podamos convertirnos en un referente importante en Colombia, disfrutando de una Popayán con parques públicos asequibles, calles seguras y una movilidad cómoda y amigable.

Muchos queremos una ciudad con seguridad, buena movilidad, desarrollo tecnológico, una donde se potencie la riqueza cultural, gastronómica y educativa. Queremos un gran centro de exposiciones que reúna a productores, emprendedores y microempresarios con desarrollos innovadores y de vanguardia. Nos imaginamos una Alcaldía de puertas abiertas a su comunidad, en donde trabajemos juntos en la agenda de una ciudad volcada al crecimiento, a la implementación de soluciones con acciones inmediatas, que priorice sobre las necesidades más apremiantes de su población.

Para hacer posible esta transformación necesitamos que nos acompañe gente honesta, trabajadora y transparente, con grandes motivaciones de arraigo y templanza, que busque hacer de Popayán esa ciudad innovadora y dinámica del futuro, donde todos sean actores principales del cambio real, ese que tanto hemos esperado.

Estuve, estoy y estaré siempre convencido y seguro, que todos podemos convertirnos en gerentes exitosos de nuestras vidas, de nuestras familias de esta amada ciudad llamada Popayán.

El gerente de la gente - Del Lado De La Gente

¿Qué hemos dejado en nuestro paso...?

Popayán no solo ha sido la cuna que me recibió. Ha sido mi hogar por décadas, como también, la ciudad que me ha visto crecer y me ha brindado todas las oportunidades para progresar. Siento una gran responsabilidad de correspondencia con su historia, con su futuro y con su gente. Ahora, es el momento para aportar mis conocimientos, trayectoria y experiencia para verla crecer. Y lo haremos con esa constancia, disciplina y persistencia que me inculcaron desde la infancia. El éxito está en amar lo que hacemos, con plena convicción y coherencia con lo que pensamos. He seguido esta filosofía desde siempre, conservando aquellos principios y valores que desde pequeño me inculcaron mis viejos queridos, Don Jorge y Doña Zoraida.

Vamos dejando a nuestro paso huellas imborrables, creando empresa, generando cientos de empleos, mejorando la productividad de la ciudad y del departamento, aumentando la actividad comercial de la ciudad a mi paso como Presidente del Consejo de Administración del Centro Comercial Campanario, generando articulación empresarial, apoyando y liderando proyectos de emprendimiento y empresarismo, siempre de la mano del fomento al trabajo y a la promoción de una ruta de crecimiento empresarial que logre generación de empleo y desarrollo tecnológico, económico y social.


Durante años, he buscado hacer de mi gestión hacia la ciudad un proyecto cuyo propósito sea el bienestar de las familias caucanas. Destaco, como un objetivo alcanzado, la creación de oportunidades laborales a numerosos habitantes de la región a través de los desarrollos empresariales que hemos logrado exitosamente durante estos años de arduo trabajo. Por esto, me reconforta saber que estas iniciativas han tenido un impacto positivo en la calidad de vida de muchos ciudadanos, fortaleciendo sus ingresos y generando estabilidad económica en sus hogares.

Por otra parte, hemos incentivado de manera decidida la actividad económica local, fomentando el desarrollo de emprendimientos y microempresas. Creo firmemente que el crecimiento económico sostenible es fundamental para el progreso de nuestra ciudad y para mejorar las condiciones de vida de todos los payaneses. Con políticas y programas estamos convencidos de que se puede fortalecer un ambiente propicio para el florecimiento de negocios, la innovación y la generación de nuevas oportunidades en nuestra ciudad.

Mi compromiso con el desarrollo de Popayán se mantiene firme, y seguiré trabajando incansablemente para que nuestra ciudad sea un referente de prosperidad, empleo y crecimiento económico. Juntos construiremos un futuro prometedor para cada familia y para toda la comunidad.

¿Cómo aportaremos a la ciudad?

Desde la alcaldía de Popayán, lograremos sembrar procesos de trasformación real para la ciudad. Mi visión abarca un gobierno que trascienda los límites tradicionales, que se abra a la participación ciudadana y escuche las voces de cada habitante. En esta búsqueda, he diseñado propuestas que permitan a los ciudadanos tener un papel activo en la toma de decisiones y acceder fácilmente a la información relevante sobre su ciudad.

Pero no nos detenemos ahí. Quiero hacer de Popayán una ciudad inteligente, una ciudad donde la tecnología se convierta en nuestra mejor aliada para lograr un desarrollo sostenible y equitativo. Desde la administración, implementaremos mecanismos tecnológicos de vanguardia, brindando herramientas que permitan una gestión más eficiente y una planificación urbana acorde a las necesidades reales de nuestra gente.

El conocimiento y la innovación serán nuestros pilares fundamentales. Impulsaremos el crecimiento económico y social a través de la generación de un ambiente propicio para la creación de empresas y el desarrollo de emprendimientos locales. Nos convertiremos en una ciudad que mira al futuro, donde el conocimiento sea el motor que nos lleve hacia el éxito.

Mi compromiso con Popayán es firme y apasionado. Con cada propuesta, con cada idea, buscamos construir una ciudad urbana y rural que inspire y que sirva de ejemplo a nivel nacional. Es un desafío enorme, pero estoy convencido de que, con el apoyo de cada ciudadano, lograremos hacer de Popayán una auténtica ciudad modelo.

¡Juntos haremos historia!