Hernando Pérez desestima propuesta de contratación para cargos directivos: Aunque legal, carece de ética

Según sus declaraciones, si bien es legal, considera que no es ético, y por lo tanto, no se le dará trámite.

Respecto a la propuesta sobre la contratación a término fijo de cargos directivos vacantes, es necesario aclarar que, si bien no es ilegal, el gerente ha destacado que esto no es congruente con los principios éticos que deberían regir la administración. Argumenta que es impresentable que el nuevo alcalde no pueda nombrar a personas de su confianza en áreas sensibles de la empresa.

Es importante recordar que las administraciones anteriores han tenido la libertad de colocar a sus fichas clave en áreas estratégicas para administrar la empresa. Sin embargo, el gerente sostiene que no se entiende por qué, en esta ocasión, se va a interferir en decisiones propias de la propuesta que ganó las elecciones.

La gestión transparente y ética en el manejo de entidades públicas, como la empresa de acueducto y alcantarillado de Popayán, es esencial para preservar el patrimonio común. Hernando Pérez envía un mensaje elocuente a la sociedad payanesa al rechazar una propuesta que, aunque legal, no se alinea con los principios éticos. Además, resalta la importancia de proteger y fortalecer estas instituciones, fundamentales para el bienestar de la comunidad. Este acto sirve como recordatorio de que el cuidado del patrimonio público no solo recae en quienes lideran estas entidades, sino que es un deber compartido por toda la sociedad. La participación ciudadana y el compromiso con la integridad son elementos clave para garantizar un futuro sostenible y próspero para el acueducto y alcantarillado de nuestra ciudad.

Cabe destacar que ni el actual alcalde, Juan Carlos López Castrillón, ni ningún miembro de la junta directiva del Acueducto y Alcantarillado de Popayán respaldan la iniciativa mencionada.

Este posicionamiento refuerza la importancia de mantener una postura ética y responsable en la gestión pública, asegurando así la coherencia entre los principios que rigen la administración y las decisiones que impactan directamente en el bienestar de la comunidad. La unidad en este rechazo subraya la necesidad de preservar la integridad de las instituciones y fortalecer la confianza de los ciudadanos en sus líderes y en las entidades encargadas de velar por el patrimonio común