Indígenas de Toribío, Cauca, aumentan los controles en sus territorios tras el asesinato de la lideresa Carmelina Yule Paví

La guardia indígena se encuentra en todo este territorio ancestral para proteger a sus comunidades luego del mortal ataque de las disidencias de las Farc.

Indígenas de Toribío, Cauca, aumentan los controles en sus territorios tras el asesinato de la lideresa Carmelina Yule Paví

Las comunidades indígenas de la zona rural del municipio de Toribío, Cauca, se encuentran en asamblea permanente luego del mortal ataque de las disidencias de las Farc contra los comuneros de esta zona del departamento.

Por eso, y buscando protegerse, los indígenas reforzaron las actividades de control territorial al interior del resguardo de Toribío, buscando expulsar a los integrantes del frente Dagoberto Ramos, responsable del asesinato de la 'mayora' Carmelina Yule Paví y un guardia.

"Activar todos los puntos de control territorial del territorio de Sek Shab Kiwe, en estos puntos se va a conversar con la gente, hacer claridades sobre la situación y concientizar", es una parte de las disposiciones impartidas por las autoridades ancestrales de este resguardo.

También aumentaron los recorridos de los comuneros en esta parte de la zona rural de Toribío, buscando expulsar a los integrantes de esta organización armada al margen de la ley.

Por eso se conocieron fotografías de cómo los indígenas, a través de la guardia, empezaron a desmontar la pancartas alusivas a las disidencias, la cuales fueron instaladas al interior de este resguardo.    

"En las horas de la noche de este domingo 17 de marzo, cuando se adelantaban estos controles, un grupo de guardias fueron atacados por los disidentes en el sector de La Luz del corregimiento de Tacueyó, por fortuna no se registraron víctimas mortales o heridos en este nuevo ataque a los pueblos ancestrales", denunciaron los integrantes del Consejos Regional Indígena del Cauca, Cric.

Esta situación sucedió 24 horas después del mortal ataque donde perdieron la vida la lideresa Carmelina Yule Paví de Ascué, de 62 años de edad; y un guardia, situación que sucedió cuando la comunidad rescataba un adolescente menor de 18 años de edad tras ser reclutado por el frente disidente Dagoberto Ramos de las Farc.

"La mayora Carmelina era una integrante de la guardia, artesana, ex autoridad del resguardo de Toribío y defensora permanente de los derechos de la mujer nasa, al momento de los mortales hechos ella lideraba a la comunidad cuando rescataban al joven secuestrado por este actor armado", expresó Jhon Ascué, sobrino de la lideresa.

A raíz de esta situación el gobierno de Gustavo Petro ordenó la suspensión del cese bilateral al fuego con el Estado Mayor Central de las Farc en los departamentos de Cauca, Nariño y Valle del Cauca. Esta decisión aumentó más la tensión entre las comunidades, especialmente entre los indígenas del norte del Cauca.  

"Coincidimos en que se trataba de un cese al fuego inoperante que solo ha servido para que los grupos armados, sigan atacando a las comunidades y destruyendo nuestra organización social y política. Sabemos que la complicidad de la fuerza pública con el crecimiento de estos grupos y economías ilegales ha sido evidente, hace parte de la situación que debe enfrentarse", denunció el Cric.