Líderes políticos del Partido Conservador Colombiano se enfrenta por el caso de José Gabriel Silva por acusaciones de doble militancia

Importantes figuras políticas del Partido Conservador Colombiano, Samy Merheg y José Darío Salazar, han expresado sus diferencias sobre una reciente controversia relacionada con la expulsión y posterior reincorporación de José Gabriel Silva debido a acusaciones de doble militancia.

Líderes políticos del Partido Conservador Colombiano se enfrenta por el caso de José Gabriel Silva por acusaciones de doble militancia

A través de un intercambio de audios se escucha a Samy Merheg decir “Hola flaco, esta es la noticia. Sí, la quería dar yo personalmente. Ya se hizo el directorio nacional, ya corrigieron. El horrible error que habían cometido por petición de este hombre, o sea, Darío, ya quedó levantado todo. Entonces, falquito mano. Yo sé que se demoró mucho, pero ahí hubo unas circunstancias externas que impidieron en los últimos 20 días tomar esa decisión. Pero ya el directorio votó unánimemente. Flaquito mano este mensaje, pues obviamente es con todo el cariño y todo el respeto."

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La respuesta del ex senador de origen caucano José Darío Salazar no se hizo esperar y manifestó “he conocido el audio anterior. En el cual tú con gran fervor le comunicas al doctor José Gabriel Silva que se ha reparado el horrible error que indujo a José Darío Salazar Cruz al directorio nacional conservador y al comité de ética, resultando en la expulsión del doctor Silva del partido conservador por doble militancia.

Quiero expresarte que el doctor Silva no fue expulsado por mi inducción al error al directorio nacional conservador, sino por las pruebas de doble militancia. Estoy esperando una explicación ante la opinión pública sobre por qué se revoca esta sanción del comité de ética.

Pero lo que sí quiero expresarte y aclararte es que no acostumbro a hacer incurrir, como tú me calificas, en horribles errores, ni al comité de ética del partido ni a la justicia colombiana. Y por eso, lejos estoy de escándalos que abochornan a Colombia y al partido conservador.

Por ejemplo, los escándalos de la Ocad Paz, donde lamentablemente queridos senadores de la República son investigados por presuntos cobros de coimas en los que se pudieran haber robado las platas de las regalías del pueblo colombiano. Tampoco he ruborizado a mi partido ni al conservatismo de Colombia con acusaciones de vínculos con el paramilitarismo, con el Clan del Golfo, donde también pareciera que se hubieran robado las platas de las regalías de los colombianos.

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Mucho menos se ruborizaba el conservatismo colombiano ni el directorio nacional ni el comité de ética de los partidos políticos con acusaciones de vínculos con el paramilitarismo o con vínculos de testaferrato, por ejemplo, con alias Macaco.

No acostumbro a ser prófugo de la justicia colombiana ni a volarme 10 años a otros países para evadir órdenes de captura. Tampoco he sido sancionado ni condenado a indemnizar firmas competidoras de empresas que, por supuesto no tengo, por haberme apropiado sin autorización de derechos de autor o de espacios de televisión.

Mi vida pública ha sido transparente, ahí está para que la revisen los colombianos. De modo que esos horribles errores en los que yo he hecho incurrir al comité de ética, que tú los mencionas en un audio que anda circulando entre los copartidarios, son errores que más bien otros cometen y hacen ruborizar al pueblo colombiano y al partido conservador, porque quienes así los cometen no saben de ética, no saben de moral, no saben de transparencia.

Afortunadamente, el doctor Silva cuenta con un abogado y al de oficio tan avezado como tú en los manejos jurídicos, en los manejos de los tinglados jurídicos, en el manejo de las pruebas frente a la justicia colombiana.

De modo que espero, pues, ¿por qué me llama la atención saber cuál fue la prueba reina en la cual se les revocó a tres ilustres magistrados de Colombia, nada más y nada menos, Nilson Pinilla, expresidente de la Corte Suprema de Justicia, expresidente de la Sala Penal de la misma, expresidente de la Corte Constitucional; Juan Pablo Cepero, expresidente del Consejo Nacional Electoral; y el doctor Julián Quintana, ex zar Anticorrupción? ¿Cuál fue la prueba reina para que a estos tres eminentes juristas se les hubiera revocado la decisión de expulsar al doctor Silva?

Definitivamente, funges como un gran abogado colombiano que conoce perfectamente cómo se maneja la justicia en este país".

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Este debate entre dos figuras prominentes del Partido Conservador Colombiano refleja las tensiones internas y las diferencias de opinión dentro del partido. La expulsión y posterior reincorporación del Dr. Silva han generado interrogantes sobre el proceso de toma de decisiones y la aplicación de sanciones en el partido. Además, se pone de manifiesto la importancia de mantener la ética y la transparencia en la política, así como de establecer mecanismos claros para resolver disputas internas.

En última instancia, este enfrentamiento puede tener un impacto en la imagen y cohesión del Partido Conservador Colombiano. Los líderes políticos deberán encontrar una manera de resolver sus diferencias y fortalecer la unidad interna para enfrentar los desafíos políticos que se les presenten. La capacidad del partido para abordar y resolver estas disputas internas será crucial para mantener la confianza de sus seguidores y para consolidarse como una fuerza política relevante en Colombia.

Escuche el audio:

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JoseDario
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Indudablemente, el Partido Conservador Colombiano ha experimentado un declive desde que Ramiro Navia, miembro destacado de dicha colectividad, obtuvo el voto de confianza de la mayoría de los habitantes de Popayán para ser alcalde de la ciudad durante el periodo comprendido entre 2011 y 2014. Durante su mandato, se tomó la decisión de entregar el servicio público de recolección de basuras a empresas privadas. Como resultado, es difícil que los ciudadanos de Popayán vuelvan a confiar en algún militante de este partido político para ocupar tan honorable y digno cargo en el futuro.