Luto en la salsa: falleció el cantante ‘Nacho’ Sanabria
Es la leyenda de la salsa, recordado por su legado y éxitos como ‘El Sabor de Nacho’ junto a su orquesta.

El luto se apodera de la salsa. Con 95 años de edad, rodeado del cariño de su familia y del respeto de sus admiradores, falleció este lunes 12 de mayo de 2025 Ignacio Nacho Sanabria, una de las voces más representativas de la salsa puertorriqueña.
La noticia fue confirmada por su nieto, Alfredo Emerson Sanabria, a través de una declaración pública que rápidamente se viralizó entre músicos, melómanos y fanáticos del género, además de las redes sociales.
“Con profundo dolor, la familia de Ignacio ‘Nacho’ Sanabria informa su fallecimiento el día de hoy, lunes 12 de mayo de 2025, a la edad de 95 años”, confirmó Alfredo.
“Nacho Sanabria Oficial fue un artista que dejó una huella imborrable en la música y en el corazón de quienes lo conocieron. Agradecemos el cariño de todos sus admiradores en este difícil momento. Que descanse en paz mi abuelo Nacho. ¡Rúñeme Mamá!”
Nacho Sanabria nació el 16 de diciembre de 1929 en Cataño, en Puerto Rico, y desde niño mostró un talento precoz para el ritmo, la música. A los cuatro años ya bailaba bomba y plena en las calles de su pueblo y a los nueve subió por primera vez a un escenario. Esa mezcla de sabor, carisma y energía lo acompañaría toda su vida.
Migró a Nueva York en 1949, donde trabajó en una fábrica mientras cantaba con la Sonora Boricua y luego en el legendario Palladium. Fue parte de la generación de artistas que forjaron los cimientos de la salsa desde los barrios latinos de la Gran Manzana. Entre 1953 y 1955 sirvió en la Guerra de Corea, donde conoció al también músico Héctor Rivera.
Su carrera como cantante lo llevó por diversas orquestas y agrupaciones musicales, entre ellas la New Yorker, la de José Fajardo, y la del icónico Rafael Cortijo, con quien grabó temas emblemáticos como “Quítate el zapato” y “La llave”. En 1966 fundó su propia agrupación: El Sabor de Nacho, con músicos de su natal Cataño, y dio rienda suelta a su visión musical.
Con su orquesta grabó más de una decena de álbumes que hoy son clásicos de colección. Su primer gran éxito fue El Sabor de Nacho Vol. I (1970), que incluyó la canción “Alma primitiva”, con letra del maestro Tite Curet Alonso. A este disco le siguieron títulos como Amada amante (1972), Muévete (1974), y Boleros con caché (1975), donde exploró con elegancia el bolero.
“La ruñidera”, tema del cubano Ignacio Piñeiro incluido en Amada amante, se convirtió en uno de los himnos de su repertorio y es una de las piezas que mejor sintetiza su estilo: bailable, sabroso y lleno de fuerza interpretativa.
A lo largo de su carrera, Nacho Sanabria trabajó con figuras como Mongo Santamaría, Ray Barretto y Bobby Valentín (quien produjo su álbum Sabor, amor y música en 1979). También grabó con sus hijos Felipe y Roberto en el disco Su Estilo y Sus Hijos (1976), dejando claro que el talento corría por la sangre.
Su último trabajo discográfico, Pa’ la calle, bailador, fue lanzado con el sello RNS y contenía una mezcla de composiciones propias y versiones de autores como Arsenio Rodríguez y Joe Cotto, siempre con su sello inconfundible de sonero clásico.