Padres de familia, inconformes por la "democrática" decisión de ampliar los horarios de clases tras el paro de Asoinca
Los padres de familia denunciaron que nunca fueron consultados por los profesores a la hora de recuperar el tiempo que invirtieron en sus movilizaciones.

¡Indignados! Así se encuentran los padres de familia de las instituciones educativas públicas de Popayán y la región, por la antidemocrática decisión de los profesores de ampliar la jornada educativa.
Ahora, los niños, niñas y jóvenes de la gran mayoría de planteles educativos oficiales terminan clases a las 2:15 de la tarde, debido a que los docentes buscan recuperar el tiempo que invirtieron en el pasado paro, liderado por Asoinca.
"Ahora mi niña tiene que llevar dos loncheras, porque debe enfrentarse a esa larga jornada, primero el descanso normal y después tienen que comer rápido el segundo refrigerio en los diez minutos que les dan después para continuar con las clases", denució Yamileth Ordóñez, madre de familia del Colegio Cristo Rey.
Ese cambio de horarios, y que son diferentes en las instituciones educativas, afecta gravemente la economía familiar, ya que los padres deben comprar una lonchera adicional, situación que sobrepasa el presupuesto de los hogares, ya golpeado por la inflación.
"Ellos hicieron su paro y ahora vienen acomodarse con las necesidades de los estudiantes y padres, imponiendo a su voluntad los horarios para recuperar clase, sin preguntarnos cómo íbamos atender esta situación, ahora esto generó una afectación a nuestros bolsillos porque somos nosotros los que pagamos por la otra lonchera que hay manderles a los muchachos", agregó Yamileth Ordóñez.
En otros casos, las jornadas académicas se ampliaron hasta los días sábados, por 'soberana decisión' de los profesores, quienes en pocos casos consultaron los padres de familia sobre esta forma de recuperar "el tiempo invertido en la protesta", denunciaron los padres.
"Además del gasto de la lonchera adicional, está el hecho de que muchos padres deben pagar para que recogan a sus hijos cuando terminan a las 2:15 p.m., porque está trabajando o porque deben pagar el doble de transporte para poder atender esta necesidad, eso si no tuvieron en consideración los maestros que salieron a las marchas", denunció Maritza Cardona, otra madre de familia.
Ademas de ese gasto adicional, está el hecho de que la mayoría trabajan en horario de oficina y no alcanzan a ir a recoger a los niños.
"Sí o sí nos toca pagar transporte o mirar si alguien de la familia los puede ir a recoger, pagando, a la hora que salen los niños porque uno apenas comienza su trabajo, no alcanzamos, eso si no lo vio Asoica a la hora de pelear por sus derechos", acotó Maritza Cardona.
Por eso buscan que las autoridades locales y regionales entren a buscar una solución a esta situación, para dejar atrás la respuesta que les dieron los rectores cuando reclamaron por este cambio: "eso ya es una decisión tomada".
Tambíen, y en aras de un equilibro periodístico, queda planteada la posibilidad para que Asoinca plasme en un futura nota su versión frente a esta inconformidad ciudadana.