Popayán, un banco de malas experiencias
La nuestra es una ciudad de huellas profundas en la historia con unas gestas por todos conocida pero tristemente muy pocas positivas en el periodo contemporáneo que han sido consecuencia de la incapacidad administrativa de quienes se han servido de Popayán.
Por: Carlos Eduardo Gómez Cajas
Así como tenemos un panteón con los restos y en memoria de nuestros más eminentes próceres, debiéramos tener también una fosa con los despojos de nuestros mediocres títeres politiqueros.
La historia se construye con experiencias negativas de las que se aprende y positivas que perduran en el tiempo y sirven de ejemplo a las generaciones presentes y futuras. La historia la escriben los creativos y los ganadores; aún cuando a día de hoy, algunos omitan datos para amañarlos según sus intereses.
En mora estamos de crear y tener un banco de experiencias exitosas para la posteridad. Un banco creativo real que deje huella, en la que se puedan consultar las obras de las cuales nos podamos sentir nuevamente orgullosos y que esté a la vanguardia de esta era digital y no solo esperar a estas épocas para criticar, suponer, demoler y destruir.
El lugar de Banco de experiencias pudo haber estado ubicado en lo que hoy sería una biblioteca pública, un centro cultural y museo de la memoria histórica "Estación del Ferrocarril del Pacífico", lamentablemente fue demolido por algún imbécil de cuyo nombre es mejor no acordarnos.
Estamos por creer que en los entes territoriales y corporaciones públicas ubicadas en el sector histórico que en épocas pretéritas estuvo plagada con niguas y gracias a las cuales llevamos con orgullo el apelativo de "patojos", hoy se encuentre en cambio, infestada de inservibles públicos y de contratistas incapaces, condenados a repetir de tumbo en tumbo, lo que le ha sido contrario a los intereses del poder público, al deseo mínimo de los ciudadanos y ante quienes se deben sus pusilánimes egos, sus honorarios y al que infortunadamente hemos acostumbrado a andar por estos días de pasarela, palmaditas en el hombro, picada de ojos y pelada de dientes. Todo un combo de inútiles con H de honorables y P de políticos.
Hablando de plagas:
¿Cómo creen que se votará el proyecto de acuerdo presentado por la administración y que tiene que ver con vigencias futuras en el caso de los hermanos Solarte y otros?
Sencillo, justo como se votó favorablemente el acuerdo que autorizó la actualización del catastro municipal y del que se contrató con el IGAC, el nuevo avalúo catastral, de la misma manera como la que se ha autorizado y se terminará aprobando todo lo que se lleve a esa corporación púbica.
Veamos, la actual administración "Creo en Popayán", llegó en coalición de los siguientes paridos: "verdes y Colombia renaciente" y, con el respaldo de varios de los 19 concejales actuales con excepción del partido de la U en razón a la ley 1909 de 2018 o Estatuto de Oposición que confirió una curul a la segunda votación obtenida por la ingeniera Rosalba Joaquí y también y no menos relevante, la desafortunada "Colombia Humana" de Bastidas, quienes simplemente actúan como notarios y que a veces, se dan buenas pelas con show y pataleo como el inútil con la CEO del cual también son incompetentes pues la última palabra y control está bajo la tutela de la superintendencia de servicios públicos.
Pues bien, las funciones fundamentales de los concejales son en términos generales o coloquiales, lograr proyectos de acuerdo, defender al gobierno de turno con el que salieron elegidos en mayoría, es decir, la coalición de paridos arriba nombrada, quiénes además buscarán lograr proyectos de acuerdo en consonancia con otras tres funciones adicionales, el plan de desarrollo municipal, el plan de ordenamiento territorial y el presupuesto municipal y las de imponer "cruz de Belalcázar" en algún grado para sobar chaqueta, gorrear pasabocas y tomar whisky hasta que se les ponga el gualgüero del color del colorado "Castillo", ello cuando hacen parte de la coalición.
Cuando son oposición al gobierno, simplemente hacer control político y acostumbrarse a salir derrotados de todas las proposiciones, eso sí, siempre defendiendo la confianza y el interés general de la ciudadanía que los eligió y finalmente están los que ni fu ni fa, pero les gusta el show en tarima, pero tras bambalinas untan de mermelada esos honorarios por cada sesión citada según la necesidad de su patrón.
De manera que, los que esperan a que el concejo no vote favorablemente el proyecto de acuerdo de vigencias futuras para pagarle a los Solarte, que la venta del acueducto, o cualquiera que esté en sus roles, no esperen lo contrario, eso más bien es un hecho notorio.
Nota: ¡Exijan voto nominal, público, televisado y el 29 de octubre se cobran según como voten, eso sí, no los descuiden del 30 de octubre al 31 de diciembre
!Adenda: Hace falta un banco de experiencias positivas para multiplicar y negativas para aprender de los errores, no repetir las cagadas de las que siempre nos arrepentimos y que cada periodo nos traguemos el sapo buscando un cambio que no llega nunca; para elegir funcionarios con calidad humana y profesional para SERVIR honrosamente a la administración pública y a la que deben llegar los mejores y no, lo que nos toque del cernido.