Revivió la Emisora 105.1 FM de la Alcaldía de Popayán: Un Triunfo Comunitario que Exige Responsabilidad
Tras un periodo marcado por cuestionamientos y dificultades administrativas, la emisora 105.1 FM de la Alcaldía de Popayán ha vuelto a la vida.

El Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones otorgó nuevamente la licencia a esta estación radial, un logro que responde a las gestiones lideradas por el alcalde Juan Carlos Muñoz Bravo, con el respaldo del secretario general Edwin Jaiber Muñoz Vásquez y el jefe de la Oficina de Gestión del Riesgo, Jair Flórez Orozco.
La reactivación de la emisora llega como una noticia alentadora, especialmente tras los momentos de incertidumbre que dejó en evidencia su ausencia. Durante la emergencia generada por la actividad del cráter Curiquinga, con emisiones de gases sulfurosos y cenizas, la falta de este canal de comunicación se sintió profundamente. Esto subraya la importancia de contar con un medio público eficiente, capaz de informar y orientar a la ciudadanía en situaciones críticas.
Sin embargo, este renacimiento no puede pasar por alto las lecciones del pasado. La comunidad payanesa, con justa razón, exige que la dirección de la emisora esté en manos de un profesional competente, con experiencia y trayectoria en el ámbito radial. Los errores administrativos que llevaron a la intervención del Ministerio, alertados desde enero de 2024 y no subsanados oportunamente, dejaron claro que la improvisación y la falta de diligencia no tienen cabida en la gestión de un bien público como este. Es imperativo que quienes tienen las riendas de 105.1 FM sean capaces de conectar con los oyentes y posicionar la emisora en el corazón de la ciudad.
Desde este medio, celebramos que Popayán recupere una herramienta tan valiosa. En nuestro compromiso editorial, tenemos claro que el éxito del alcalde Juan Carlos Muñoz Bravo y del gobernador del Cauca redunda en el bienestar de todos los habitantes de la ciudad y del departamento. Estas son verdades inamovibles para nosotros. No obstante, esa convicción no nos impide señalar con claridad que la falta de diligencia de algunos funcionarios en situaciones como esta debe ser corregida con decisión y transparencia. Todo lo que es público pertenece a la comunidad y está al servicio de ella; por ello, no se puede tolerar que intereses políticos o decisiones complacientes pongan en riesgo su propósito.
La programación de la emisora, como lo establece la normativa, debe priorizar un 60% de contenido relacionado con la gestión del riesgo y un 40% dedicado a la participación comunitaria, sin descuidar los espacios informativos y de opinión que fortalezcan el debate público. Este es el momento de acertar, de evitar que la emisora caiga en manos de quienes la vean como un botín político en lugar de un patrimonio colectivo. Que no se repitan los errores del pasado: la 105.1 FM no pertenece a los "polítiqueros", sino a los payaneses.
En este nuevo capítulo, hacemos un llamado a las autoridades para que la elección del equipo directivo sea un ejercicio de responsabilidad y visión. Popayán merece una emisora que informe, eduque y acompañe, liderada por profesionales que honren su historia y su gente. Que este renacimiento sea motivo de celebración, pero también de reflexión: el éxito de lo público depende de la competencia y la diligencia de quienes lo gestionan. ¡Felicidades a Popayán por recuperar su voz! Que nunca más se apague por descuido o intereses mezquinos.