Se adelantaron los Tradicionales Carnavales de Negros y Blancos en Popayán, todo gracias al Desfile de Taitapuros

Este domingo 28 de diciembre, las animadas calles del centro histórico de Popayán se llenaron de color, música y tradición con la celebración del Desfile de Taitapuros, un evento cultural que se adelantó como un anticipo a los famosos carnavales de Negros y Blancos. En esta ocasión, diversas figuras emblemáticas adornaron el recorrido, creando un ambiente festivo que reafirmó la riqueza cultural de la capital del Cauca.

Entre los personajes destacados, se encontraban el presidente Gustavo Petro, la mujer campesina, el icónico Bob Marlin, y reconocidos artistas como Darío Gómez, Andrés Franco, y la figura insigne de Blanca Ligia. También fue homenajeada la memoria del periodista Fredy Calvache, quien dejó una huella indeleble en la comunidad payanesa. La culminación del desfile tuvo lugar en la Arcada de La Herrería, más conocida como el Puente del Humilladero, un punto emblemático que conecta la historia con la cultura contemporánea.

Andrés Illera, periodista y locutor muy estimado en la región, expresó durante la premiación: “Acá tenemos a todas las familias payanesas y caucanas, celebrando, gozando, por encima de todas dificultades. Estos personajes representan la vida, el alma de nuestra cultura, por eso este domingo es para celebrar y estar unidos”. Sus palabras resonaron entre los asistentes, que se unieron en una auténtica celebración de la identidad cultural local.

El Desfile de Taitapuros se erige como un adelanto de lo que serán las tradicionales celebraciones de enero, específicamente los carnavales de Pubenza o Negros y Blancos, donde las comunidades se congregan para festejar el inicio del nuevo año. Las comparsas, junto a sus taitapuros, cuentan historias que alimentan la memoria colectiva y reflejan la diversidad y riqueza de las expresiones culturales del Cauca.

El alcalde Juan Carlos Muñoz también compartió sus reflexiones sobre la relevancia de este evento: “Muy bonita esta actividad, la cual es la muestra de que la cultura y el arte son expresiones que reflejan la alegría de nuestros ciudadanos. Son muchas comparsas con sus taitapuros que cuentan una historia y aportan a la memoria colectiva”. A través de su discurso, reafirmó el objetivo del evento: que sean los propios payaneses quienes construyan sus referentes históricos, en honor y memoria de quienes han dejado una marca en la región, como el fallecido periodista Fredy Calvache.

Calvache, cuyo deceso ocurrió el pasado 29 de agosto en Zúrich, Suiza, tras enfrentar una dura lucha contra el cáncer de estómago, fue homenajeado por la comunidad, que anhelaba rendirle tributo en su tierra natal. A pesar de que su deseo fue partir hacia la eternidad en Popayán, la realidad fue distinta; no obstante, su espíritu sigue vivo en cada uno de los taitapuros que lo recuerdan y celebran su legado.

Otro personaje destacado fue Blanca Ligia, símbolo de la voz popular payanesa. Reconocida por su fuerte personalidad y activismo social, ha luchado incansablemente por su comunidad, particularmente en el tradicional Parque de Caldas. Con su potente voz, se ha convertido en una figura crítica hacia los políticos, reclamando por los derechos de su barrio y ganándose tanto cariño como controversia entre los habitantes de la ciudad.

Asimismo, se honró la memoria de Karen, conocida como La Hassam, una mujer trans que perdió la vida en un procedimiento policial. Su carisma y alegría habían dejado una huella profunda en la vida social payanesa, y sus amigos levantaron un taitapuro en su honor, recordando la importancia de la inclusión y la lucha contra la intolerancia en la sociedad. Este gesto representó la resiliencia y la fuerza de quienes aún enfrentan la exclusión.

La música popular también tuvo su espacio durante el desfile, con la participación de artistas como Darío Gómez y el agropecuario Andrés Franco, quienes contribuyeron al ambiente festivo y atractivo del evento. La diversidad de personajes y las variadas expresiones artísticas hicieron de este desfile un momento memorable para todas las familias que se congregaron en la tarde del domingo.

En conclusión, el Desfile de Taitapuros no solo sirve como un adelanto de los carnavales de Negros y Blancos, sino que también celebra la identidad cultural y la unidad de la comunidad payanesa. A través de sus personajes, historias y tradiciones, Popayán reafirma su lugar como un epicentro de cultura y alegría, uniendo a sus habitantes en la alegría y el recuerdo de aquellos que han dejado huella en su historia. Este evento no es únicamente un modo de celebración, sino un llamado a mantener viva la memoria y la cultura que definen a esta región del país.