Solicitan nulidad del nombramiento de Heidee Becerra como Secretaria de Cultura en Popayán: ¿Otro capítulo de la tragedia de la corrupción?
Popayán sumida en la espiral de la corrupción: nombramientos irregulares y funcionarios cuestionados
La indigna situación que vive la administración municipal de Popayán, con el presunto nombramiento irregular de Heidee Mariela Becerra Gómez como Secretaria de Cultura y Turismo, parece ser solo la punta del iceberg de un problema mucho más profundo y sistémico: la aparente captura de la institucionalidad local por parte de oscuros intereses ligados a prácticas corruptas.
De confirmarse las graves irregularidades denunciadas en torno a la designación de Becerra, quien presuntamente no cumplía con los requisitos exigidos y enfrentaba una inhabilidad vigente, este lamentable caso se sumaría al creciente listado de escándalos que han empañado la gestión del alcalde Juan Carlos Muñoz, pese a su promesa de recuperar la confianza ciudadana.
Pero hay más. La situación se torna aún más preocupante si tenemos en cuenta que la propia Fiscalía General de la Nación considera solicitar la detención preventiva del Secretario del Deporte, Guillermo Marmolejo, por su presunta implicación en un caso de corrupción en el lamentable caso del Instituto de Deportes del Cauca (Indeportes). Un hecho que refuerza la percepción de que el actual equipo de gobierno municipal está plagado de funcionarios cuya honorabilidad e integridad son cuestionadas por los entes de control.
Es inaceptable que el máximo dirigente del municipio payanés insista en rodearse de personas cuya conducta está siendo escrutada por la justicia. Su terquedad por mantener en altos cargos a individuos que representan un lastre para la institucionalidad solo alimenta la desconfianza ciudadana y siembra más dudas sobre la verdadera agenda de su administración y su compromiso real con la lucha contra la corrupción.
Según la demanda de nulidad electoral interpuesta por el ciudadano Duvan Felipe Sánchez Santeliz, Becerra habría sido nombrada y posesionada en tan alto cargo pese a no cumplir con los requisitos de formación académica y experiencia exigidos por el manual de funciones. Un acto de flagrante prevaricato que, por sí solo, debería ser motivo suficiente para revertir su designación de manera inmediata.
Al parecer, para el momento de su nombramiento, Becerra tenía vigente una medida correctiva por irrespetar a las autoridades de policía, lo que constituye una inhabilidad expresa contemplada en el Código Nacional de Seguridad y Convivencia Ciudadana. Es decir, su designación pudo haber violado abiertamente el orden jurídico colombiano.
Así las cosas, Hacemos un enérgico llamado a las autoridades competentes para que investiguen a fondo estos graves señalamientos y se apliquen las consecuencias disciplinarias, fiscales y penales a que haya lugar. Es inadmisible que actos tan abiertamente viciados de ilegalidad sigan campantes en una administración que se supone debe ser ejemplo de rectitud y apego a la ley.
Al alcalde Juan Carlos Muñoz le corresponde asumir la mayor cuota de responsabilidad en este lamentable episodio. Como máxima autoridad administrativa del municipio, su deber constitucional es garantizar que los nombramientos se realicen con estricta sujeción a las normas vigentes. No puede escudarse en asesorías deficientes o pretextos burocráticos.
La ciudadanía payanesa está cansada de los permanentes escándalos de corrupción que erosionan las ya vapuleadas instituciones de nuestra ciudad. Exigimos hechos contundentes que restauren la confianza y la credibilidad en la administración municipal. De lo contrario, Popayán seguirá hundiéndose en el lodazal del descrédito y la desidia administrativa.
¡Es hora de poner fin a estas prácticas corruptas! La capital caucana merece un gobierno decente y digno, ajeno a los tentáculos de la ilegalidad. Alcalde Muñoz, debe actuar ya antes de que sea demasiado tarde.