Suspendido abogado que abusó de la justicia para libera a seis presuntos delincuentes procesados por el lavado de más de 20 millones de dólares

Pese a que ya había sido resuelta la situación jurídica de los investigados, el abogado insistió, entorpeciendo la administración de justicia.

Suspendido abogado que abusó de la justicia para libera a seis presuntos delincuentes procesados por el lavado de más de 20 millones de dólares



La Comisión Nacional de Disciplina Judicial dejó en firme la decisión de primera instancia que suspendió por cuatro meses al abogado de seis personas vinculadas por la Fiscalía a una estructura criminal con injerencia en Cauca y Antioquia.

Se trata de Aldemar Alberto Sáez Lozano, Carlos Alberto Sáez Jaramillo, Camilo Sáez Pineda, Ana Milena Pineda Muñoz, José Julián Vásquez Arboleda y Claudio Gilberto Hernández Lerma, quienes fueron capturados en el marco de una operación que terminó con 16 detenidos en Medellín, Sabaneta y Timbiquí, incluido un funcionario de la alcaldía de este último municipio.

Según las autoridades, estas personas harían parte de un Grupo Delictivo Organizado (GDO) que en 4 años habría lavado más de 20 millones de dólares a través de la comercialización de oro extraído ilícitamente.

En el caso concreto de los defendidos por el hoy sancionado, fueron procesados por lavado de activos agravado, concierto para delinquir agravado y fraude procesal, siendo privados de la libertad en centro carcelario. Con la causa penal avanzada, el abogado promovió una audiencia preliminar por vencimiento de términos y/o sustitución de la medida de aseguramiento, pretensiones que fueron negadas por el Juzgado Sexto Penal Municipal con Función de Control de Garantías de Cali.

No conforme con la respuesta, el apoderado insistió como defensor y como agente oficioso, acumulando al final una acción de tutela y tres solicitudes de hábeas corpus, donde alegaba el vencimiento de los términos judiciales. Sin embargo, ninguno de esos recursos prosperó y, por el contrario, la decisión inicial de la justicia fue confirmada por el Juzgado Tercero Penal del Circuito de Conocimiento de la capital vallecaucana.

Debido al proceder del jurista, se compulsaron copias a la Comisión Nacional de Disciplina Judicial, la cual, luego de valorar las pruebas, concluyó que con su conducta el abogado sometió a la justicia a un desgaste innecesario, abusando de las vías del derecho en contravía de su finalidad.

En fallo con ponencia del magistrado Julio Andrés Sampedro Arrubla, la Corte Disciplinaria calificó el comportamiento del investigado como impertinente, temerario y caprichoso, pues sus pretensiones ya habían sido resueltas, queriendo entonces congestionar la administración de justicia con pleno conocimiento y voluntad de su actuar.