¡Vergüenza Municipal! Habitantes de Calle Reemplazan a Autoridades de Tránsito en Popayán

La incompetencia de la Secretaria de Tránsito opaca la recuperación de Popayán

¡Vergüenza Municipal! Habitantes de Calle Reemplazan a Autoridades de Tránsito en Popayán

En medio de los ambiciosos anuncios sobre inversiones en Popayán, por parte del alcalde Juan Carlos Muñoz. La Secretaria de Tránsito, María Liliana Vargas Guzmán, brilla por su negligencia al permitir que sean habitantes de calle quienes dirigen el tráfico vehicular en la ciudad, en vez de reguladores capacitados.

Resulta indignante y surrealista observar cómo personas en situación de extrema pobreza y vulnerabilidad terminan haciendo una labor que le corresponde a la administración municipal. Todo porque Vargas Guzmán no ha tenido la capacidad para contratar el personal necesario para una función tan sensible.

No sólo expone a riesgos a los transeúntes al delegar el control del tráfico a personas sin formación, sino que revictimiza y precariza aún más a quienes ya cargan con la miseria más extrema.

Y lo peor es que esto sucede justo cuando el alcalde Juan Carlos Muñoz se reúne con inversionistas chinos y nacionales, ilusionando a los payaneses con promesas de recuperación económica que se ven opacadas por la negligencia de la Secretaria de Tránsito del Municipio de Popayán.

La Secretaria debe renunciar de inmediato antes de que su negligencia le cueste la vida a algún ciudadano. Y el alcalde Muñoz debe entender que la recuperación de Popayán empieza por garantizar funciones básicas del municipio, como el correcto control del tráfico. De nada sirven las inversiones si prima la incompetencia y la desidia de sus funcionarios.

Es hora de que el Alcalde se enfrente a la realidad y priorice las necesidades reales de los ciudadanos de Popayán. La movilidad de nuestra ciudad está en crisis y esta alianza rota solo demuestra su falta de compromiso con el bienestar de la comunidad. Es momento de actuar con responsabilidad y liderazgo, ¡Popayán merece más que palabras vacías y promesas incumplidas!