"Vicky publica, la Fiscalía allana y el uribismo marcha"

La Revista Semana, que fue comprada y reacondicionada como el vehículo para convertir a los banqueros Gilinski en el primer grupo económico del país, puede ser ahora su mayor obstáculo para lograrlo.

"Vicky publica, la Fiscalía allana y el uribismo marcha"

Por María Jimena Duzán, tomando de la Revista Cambio Colombia y la publicamos por su aporte al debate sobre el ejercicio del periodismo.

Gabriel Gilinski, el millonario de 36 años dueño de la Revista Semana, transformó este medio en un monstruo digital pero se le está saliendo de las manos su propio invento. Eso quedó claro con lo que sucedió esta semana, cuando su revista le dio credibilidad a una fuente anónima, de segunda mano, que no fue ni contrastada, ni corroborada y que vinculó directamente al presidente Gustavo Petro con el escándalo.

Semana hizo revelaciones “explosivas” —como les gusta decir— que enlodan al presidente y que estuvieron basadas en un testimonio pegado con babas. La fuente de Semana asegura que el coronel Dávila le dijo que la plata de ese robo no era de Sarabia, sino del propio presidente Petro y que el monto que los ladrones sustrajeron del apartamento no fue de 7.000 dólares, como lo dijo ella ante la Fiscalía; ni de 150 millones como insinuó Armando Benedetti, sino de 3.000 millones de pesos, dinero que Petro habría enviado al apartamento de Sarabia en cinco maletas para que se lo guardara, como si se tratara de una caleta de un don de la mafia. Así, por puras oídas, sin verificar si lo que decía la fuente era cierto, sin una prueba de la versión proveniente presuntamente de un difunto y sin abrir ángulos de contexto ni pedir una declaración al presidente, la revista dio por hecho que su fuente anónima decía la verdad y dictó su veredicto en un trino de Vicky Dávila: “Urgente: La plata era de Petro, eran 5 maletas y 3.000 millones de pesos”.

Semana, a falta de una oposición real que sea capaz de tener una voz potente, se ha convertido no solo en una máquina digital sino en la única oposición que hay en Colombia. Su objetivo no es publicar noticias veraces sino escandalizar, alimentar la indignación y darle municiones a esa oposición hambrienta de poder para que se fortalezca. El usuario típico de Semana está más dispuesto a ratificar sus prejuicios que a informarse de hechos que los contradigan. Ya hay convocada para este martes 20 de junio una gran manifestación del uribismo contra el presidente y muy seguramente el plato fuerte de esa marcha van a ser las revelaciones “exclusivas” de Semana —tan exclusivas que ningún medio serio las retomó-. No creo en la tesis de que hay un golpe blando en ciernes contra Gustavo Petro, porque tengo claro que sus grandes reveses son culpa de sus errores. Pero cuando se ve todo este tinglado, uno empieza a creer que algo hay de cierto: Vicky publica, la Fiscalía allana y el uribismo marcha

Pese a sus innegables triunfos digitales es probable que Vicky Dávila, con esta manera temeraria de lanzarse contra sus enemigos, cargada de explosivos, haya roto el encanto que hubo entre ella y el dueño de la revista. La razón no fue que Vicky cruzara las líneas éticas ni porque lo hubiera hecho por su propia cuenta, cosa que no es creíble. Lo que sucede es que los mismos actos que antes le caían en gracia al dueño ahora pueden afectar gravemente sus negocios. Muchas de las jugadas presentes y futuras del grupo Gilinski van a depender del Gobierno y viendo cómo les fue con Duque a sus adversarios del GEA, los Gilinski saben que pelear con un presidente no es buen negocio.

Entre Petro y la familia Gilinski hay una historia de cercanías que se ha vuelto tóxica desde que Gabriel decidió comprarle la revista a Felipe López y ambos acordaron nombrar como directora a Vicky Dávila, una periodista talentosa y hecha a pulso. Gabriel y Vicky montaron este monstruo digital que es hoy Semana y lo echaron a andar, movidos por su afán por el clic y por las noticias sensacionalistas y amarillistas. Su apuesta fue exitosa porque si bien Semana perdió influencia entre lectores calificados, logró atraer nuevas audiencias sedientas de lo que Vicky en su entrevista con María Isabel, llamó “noticias crudas”.