Vídeo revela como se ejecutó el secuestro del pequeño Lyan José Hortúa Bonilla en Jamundí

La grabación de una cámara de seguridad evidencia el angustiante instante en el que un grupo armado irrumpe en una vivienda donde la familia del menor se encontraba reunida en la cocina, luego retienen al niño.

Vídeo revela como se ejecutó el secuestro del pequeño Lyan José Hortúa Bonilla en Jamundí

La búsqueda del pequeño Lyan José Hortúa Bonilla, secuestrado el pasado 4 de mayo en el corregimiento de Potrerito, zona rural del municipio de Jamundí, en el Valle del Cauca, sigue por parte de las autoridades, sin resultados positivos hasta el momento.

En cámara se observa el instante en que la familia departía en la cocina de la lujosa vivienda, cuando son interrumpidos por delincuentes armados, vestidos de negro y usando pasamontaña.

Los antisociales después amenazan a los presentes en la casa y proceden después a buscar al menor, para llevárselo con rumbo desconocido.

El vídeo muestra que a la vivienda ingresaron al menos cinco sujetos armados, uno de ellos con un fusil, los cuales se apresuraron para poder intimidar a los integrantes del hogar.

Algunos de los delincuentes se dirigieron a los pisos superiores de la vivienda, pero estos fueron intimidados por disparos de un arma de fuego que, al parecer, fue accionada por uno de los habitantes de la casa.

Luego de esto, dos de los delincuentes tomaron como rehén a una mujer en la parte inferior de la vivienda, quien al parecer era la empleada doméstica del lugar.

“Matamos la señora, tráela, tráela”, decía uno de los delincuentes mientras sacaban a la víctima del sitio en el que se escondía.

La ciudadana fue intimidada en reiteradas ocasiones para que diera información, pero esta se negaba diciendo que solamente era una empleada doméstica.

Algunos segundos después, en medio de la algarabía, Lyan José Hortúa Bonilla salió de la parte inferior de la vivienda con las manos en alto y fue tomado inmediatamente como rehén por el grupo criminal.

“Dígale que salga porque si no le mato al peladito”, decía el delincuente al referirse, al parecer, a la persona que estaba en los pisos superiores y disparó.

Un metraje diferente muestra la perspectiva de la situación desde el piso superior (donde ocurrieron los disparos), en este se ve el momento en el que un hombre corre con un bebé en brazos para ocultarse de los delincuentes, pero unos segundos después se ve a los secuestradores subiendo para buscarlo.

Aunque esta última filmación está sin audio, se logra intuir que alguien dispara desde el interior de una de las habitaciones y esto logró que los delincuentes descendieran las escaleras para evitar ser heridos, pero mientras lo hacían también dispararon.