Zona norte hace historia y se corona campeón en las categorías femenina y masculina de la segunda Copa de Fútbol Jóvenes Cric

El deporte es otro de los espacios para unir a las comunidades indígenas, buscando que los jóvenes se sumen a esta clase de torneos.

Zona norte hace historia y se corona campeón en las categorías femenina y masculina de la segunda Copa de Fútbol Jóvenes Cric



Con dos finales memorables y un doble triunfo, los equipos femenino y masculino de Zona Norte se consagraron campeones de la Segunda Copa de Fútbol Jóvenes CRIC, reafirmando el poder del deporte como herramienta de transformación, unidad y resistencia en los territorios indígenas del Cauca.

En la rama femenina, Zona Norte se impuso con un contundente 4 - 0 frente a COTAINDOC, mientras que en la categoría masculina logró una victoria sólida de 2 - 0 frente al equipo de Juan Tama. Ambas finales se disputaron en la cancha del Centro Deportivo Universitario (CDU) de la Universidad del Cauca, en Popayán, en medio de un ambiente de alegría, comunidad y orgullo territorial.

Durante varios días, 11 territorios del Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC) compitieron con equipos tanto femeninos como masculinos, destacando no solo el talento deportivo, sino también el compromiso organizativo de la juventud indígena con la vida, la paz y la defensa del territorio.

Más allá del marcador, esta copa representa un acto de resistencia simbólica y real frente a los contextos de conflicto armado y violencia que afectan a muchas comunidades. La participación activa de los jóvenes en este tipo de espacios les permite construir nuevas formas de liderazgo, alejados de dinámicas de guerra y exclusión.

“Este campeonato le arrebata a la guerra a nuestros jóvenes. Nos demuestra que en la cancha también se defiende la vida y el territorio”, afirmó Johan Chocué Coordinador Dual jóvenes del CRIC.

El evento fue impulsado por el Programa de Jóvenes del CRIC, como parte de una estrategia política y cultural para fortalecer el tejido comunitario desde la práctica del deporte propio, el respeto mutuo y la identidad colectiva.

Ambos equipos campeones —femenino y masculino— de Zona Norte son hoy un símbolo de esperanza para toda la juventud indígena del Cauca.