AAPSA defiende su gestión financiera ante el Concejo: cifras, dudas y una promesa de seguir siendo pública

El gerente del Acueducto de Popayán, John Diego Parra Tobar, expuso ante el Concejo Municipal los estados financieros de 2024, en medio de cuestionamientos por el uso de recursos, el aumento de gastos laborales y la efectividad de la gestión de cartera.

AAPSA defiende su gestión financiera ante el Concejo: cifras, dudas y una promesa de seguir siendo pública

En una sesión transmitida públicamente y con la presencia de estudiantes universitarios, el gerente de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Popayán (AAPSA), John Diego Parra Tobar, presentó el balance financiero de la vigencia 2024. El informe llega en un momento clave, tras semanas de debate sobre la situación económica de la empresa, los rumores sobre una posible privatización y los reclamos ciudadanos por el estado del servicio.

Durante su intervención, Parra aseguró que los estados financieros fueron elaborados bajo las normas legales y auditados por entidades como la Contraloría, la Contaduría General de la Nación y la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios. Según explicó, la empresa obtuvo ingresos operacionales por $57.248 millones, un incremento del 9 % respecto a 2023, pero cerró con una utilidad neta de apenas $548 millones, reflejando una caída del 60 % en sus resultados.

La liquidez, bajo presión

Uno de los datos más comentados fue la razón corriente, que descendió a 1,04, dejando a la empresa en el límite de la iliquidez. “Con los recursos que tenemos a corto plazo, apenas alcanzamos a cubrir nuestras obligaciones inmediatas”, explicó el contador José Luis Ortiz, con más de 26 años en la entidad.

Aunque se destacó una disminución del endeudamiento general, el pasivo financiero de corto plazo aumentó un 52 %, debido al traslado contable de obligaciones desde el largo plazo. El gerente aclaró que en 2024 se cumplió con el pago de $6.500 millones en deudas, hecho que, según dijo, afectó la utilidad pero demuestra disciplina financiera.

Más gasto, menos utilidad

Los concejales Lucio Jurado y Fernando López llamaron la atención sobre el incremento en los gastos administrativos (más de $1.100 millones) y en las obligaciones laborales (+$2.100 millones). Se cuestionó también el aumento en la cartera morosa, que sumó $117 millones adicionales, lo que pone en duda la efectividad de las estrategias de cobro.

El concejal Luis Enrique Inchima pidió detalles sobre los gastos diversos y los depósitos de terceros, mientras que la concejala Rosa Agustina Sinisterra preguntó si el aumento de la deuda de corto plazo respondía a una urgencia o a una estrategia financiera. El gerente respondió que el deterioro heredado de 2023, cuando se hicieron gastos por más de $3.100 millones sin presupuesto, obligó a tomar créditos para cubrir obligaciones inmediatas.

Pérdidas de agua, Urbaser y el dilema de la facturación

Uno de los puntos recurrentes en las intervenciones fue la inquietud por las pérdidas de agua que superan el 30 % según se dijo y la falta de control en urbanizaciones con medidores colectivos. Los concejales José Alexander Campo, Daniel Muñoz y Julián Ausecha coincidieron en que debe avanzarse hacia una medición individual y en que las más de 287 asociaciones irregulares deben integrarse al sistema legal mediante un nuevo Plan de Ordenamiento Territorial (POT).

También se debatió sobre el impacto de la empresa Urbaser en la facturación. Algunos concejales propusieron que el servicio de aseo se facture por separado, pues su costo es percibido como desproporcionado frente al del agua, y estaría influyendo negativamente en la morosidad.

Gerente responde: “La empresa sigue siendo de los payaneses”

Frente a los rumores de privatización, el gerente Parra fue enfático: “Esta administración no tiene ninguna intención de privatizar el acueducto. Esta empresa seguirá siendo pública y de los payaneses”.

Agregó que la clave está en fortalecer la captación de recursos, mejorar la recuperación de cartera y ajustar la operación con visión empresarial, pero sin abandonar el enfoque social: “La ley 142 nos trata como empresas privadas, pero nosotros prestamos un servicio público vital. Debemos mantener el equilibrio”.

¿Qué sigue?

Aunque varios concejales valoraron la disposición del gerente para dar explicaciones públicas y transparentes, también hubo llamados a entregar respuestas más detalladas por escrito, especialmente en lo relacionado con gastos específicos, convenios pendientes y la ejecución de proyectos como la PTAR y la Comuna 2, que no iniciaron en 2024 pese a contar con recursos asignados.

El Concejo Municipal anunció que hará seguimiento al cumplimiento de los compromisos y solicitará información adicional sobre los contratos de facturación, recuperación de cartera y proyecciones para 2025.

📌 ¿Por qué importa esto?

  • El acueducto es una empresa clave para Popayán, tanto en lo económico como en lo social. Su sostenibilidad afecta a toda la ciudad.
  • La caída de las utilidades y el aumento de pasivos son señales de alerta que deben ser atendidas con medidas concretas y no solo con discursos técnicos.
  • La falta de ejecución en proyectos críticos como la PTAR podría comprometer la calidad del agua y el desarrollo urbano.
  • El manejo de la comunicación institucional y la transparencia serán determinantes para recuperar la confianza ciudadana.