Asamblea del Cauca recibió a familiares de secuestrados y alzó su voz por la libertad y la dignidad humana

Los sectores sociales y políticos del Cauca acompañan a los familiares en la lucha por la libertad de estos trabajadores.

Asamblea del Cauca recibió a familiares de secuestrados y alzó su voz por la libertad y la dignidad humana

En un acto cargado de dolor, esperanza y exigencia, la Asamblea Departamental del Cauca abrió sus puertas este martes a los familiares de personas secuestradas en el departamento, en un encuentro donde se reclamó con vehemencia la libertad inmediata de todos los ciudadanos que hoy permanecen en cautiverio, así como el acompañamiento integral a sus familias.

Con carteles, fotografías y lágrimas que no se ocultan, los asistentes recordaron que detrás de cada secuestro hay un drama humano que no puede seguir siendo ignorado. En su pronunciamiento, el diputado William Campiño expresó un enérgico llamado en defensa de los derechos fundamentales y contra la normalización de esta práctica criminal.

“El secuestro no puede, bajo ninguna circunstancia, convertirse en un método de presión ni en una moneda de cambio. Es una violación profunda a la dignidad humana, un crimen que desgarra el alma de las víctimas, fractura a sus familias y perpetúa el dolor en una sociedad que anhela, con urgencia, caminos de reconciliación y justicia”, afirmó Campiño ante los medios y los asistentes al recinto.

El diputado también advirtió que no basta con exigir la libertad de los secuestrados. “Es indispensable garantizar acompañamiento psicosocial, jurídico y humano a las víctimas y a sus familias, quienes cargan cicatrices que no siempre son visibles pero sí profundamente dolorosas”.

Durante su intervención, el dirigente caucano hizo un llamado directo al Gobierno Nacional, a las Naciones Unidas, a la Organización de Estados Americanos (OEA), a la Cruz Roja Internacional y a todos los organismos defensores de derechos humanos para que actúen con urgencia y no se conviertan en espectadores silenciosos ante una tragedia que sigue golpeando a regiones como el Cauca.

“Como sociedad, no podemos normalizar el secuestro ni aceptar el silencio como respuesta. La vida, la libertad y la dignidad deben ser principios innegociables. La paz verdadera solo será posible cuando se respeten los derechos fundamentales y se rechacen todas las formas de violencia”, concluyó Campiño, visiblemente conmovido.

No más secuestros. No más indiferencia. ¡Libertad ya!