🔴 ¿Cobrar por informar? La Junta Pro Semana Santa le cierra el paso a la prensa en Popayán
La denuncia del periodista Fernando Rojas, corresponsal de Caracol Televisión en Popayán, ha dejado en evidencia una situación preocupante que merece la atención de toda la ciudadanía y, sobre todo, de quienes integran la Junta Permanente Pro Semana Santa.

En palabras del comunicador:
"En San Agustín llegó un sujeto a decirme que tenía que salirme. Le dije que me diera un ratico porque iba en vivo para la emisión de las 7 y que quería mostrar la Virgen de los Dolores mientras salía la procesión de la iglesia. Me dijo que de malas, que la orden era que nos saliéramos los periodistas."
Este testimonio no solo resulta paradójico, sino alarmante. ¿Desde cuándo el trabajo periodístico, que busca mostrar al mundo las tradiciones espirituales y culturales de Popayán, se ha convertido en un estorbo para quienes organizan la Semana Santa?
Como si fuera poco, varios periodistas y reporteros gráficos han manifestado su inconformidad por el cobro de $20.000 diarios por una escarapela de acceso, exigida por la Junta Permanente para poder cubrir las procesiones. Si se tiene en cuenta que son cinco días principales, el total asciende a $100.000. Una suma que para muchos trabajadores de medios independientes es simplemente inasumible.
Desde Periódico Virtual, compartimos con nuestros seguidores el contenido oficial en el que se especifica el cobro y condiciones de dicha acreditación. Según el documento emitido por la Fundación, se establece:
- Vestimenta formal: Se recomienda la asistencia a las procesiones con vestimenta formal, como una forma de garantizar el respeto y la solemnidad de las ceremonias.
- Tarifa de acreditación: El valor de la acreditación diaria (por día) es de $20.000 COP, monto destinado a cubrir costos de impresión y demás aspectos logísticos. El pago debe hacerse de forma física y por día, en la sede de la Junta.
- Uso y validez: La acreditación es personal, intransferible y debe portarse en todo momento de forma visible durante las actividades autorizadas.
- Derecho de aprobación: La Fundación se reserva el derecho de aprobar o denegar solicitudes de acreditación, incluso por razones de seguridad.

La paradoja del mensaje cristiano
En un acto profundamente contradictorio, en el que se recuerda el sacrificio de Jesús, el mensaje de humildad y entrega parece haberse desdibujado entre restricciones y cobros que alejan a quienes quieren mostrar lo mejor de Popayán. La prensa no está para lucrarse con la tradición, sino para compartirla, preservarla y proyectarla. Convertir el acceso en un privilegio pago no solo es una barrera, sino una forma de excluir al pueblo mismo de su patrimonio.
Vale la pena contrastar esta situación con lo ocurrido durante la conocida procesión del pueblo, realizada el pasado lunes, donde los periodistas manifestaron haber recibido un trato digno, respetuoso y sin trabas para desarrollar su labor. A diferencia de las jornadas oficiales organizadas por la Junta, allí se vivió una verdadera comunión entre fe, cultura y ciudadanía, como debería ser en todos los casos.
La Junta Permanente, responsable de coordinar esta conmemoración que ha sido reconocida por la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, debería recordar que esta celebración no le pertenece. Es un legado colectivo, profundamente enraizado en la identidad de Popayán y del suroccidente colombiano. Cualquier intento de privatizarla, controlarla o convertirla en un negocio, desdibuja su verdadero sentido.
Desde Periódico Virtual, expresamos toda nuestra solidaridad y respaldo al periodista Fernando Rojas, corresponsal de Caracol Televisión, quien ha sido víctima de un acto de irrespeto en el ejercicio legítimo de su labor informativa. Su compromiso por mostrarle al país y al mundo la riqueza cultural y espiritual de Popayán merece reconocimiento, no censura.
Fernando representa a cientos de comunicadores que, muchas veces sin garantías, trabajan con vocación para visibilizar lo mejor de nuestro territorio. Defender la libertad de prensa es defender también la verdad, la memoria y el derecho de los pueblos a narrarse a sí mismos.
Gracias, Fernando, por seguir informando.