El compromiso de Ermes Pete Vivas con su comunidad, un ejemplo real de democracia participativa

Este reconocido líder indígena confirma cómo serán las cartas políticas del movimiento indígena en el marco del actual electoral. "Yo soy dirigente político gracias a mi comunidad", reconoce.

El compromiso de Ermes Pete Vivas con su comunidad, un ejemplo real de democracia participativa

Ermes Pete Vivas, representante a la Cámara por el Pacto Histórico, se presenta como un ejemplo claro de lo que puede alcanzar una política arraigada en la comunidad.

Desde su perspectiva, la verdadera esencia de la democracia radica en el reconocimiento del poder de decisión de la comunidad que lo eligió. Para él, esta no es solo una formalidad; es un principio fundamental que guía su trabajo político.

Vivas sostiene firmemente que son las comunidades indígenas las que deben decidir sobre sus cuadros y dirigentes políticos, en contraposición a los procesos tradicionales donde los candidatos son impuestos desde arriba, a dedo.

En el ámbito indígena, la política funciona de manera completamente diferente. Las comunidades tienen la autoridad para elegir a quienes los representarán, una práctica que asegura que los intereses y necesidades locales sean verdaderamente escuchados.

Por eso Vivas enfatiza que su mandato proviene de sus hermanos y hermanas, un claro reflejo de la voluntad colectiva. "Soy un dirigente gracias a mi comunidad", afirma, y esta declaración resuena con el espíritu de una política inclusiva donde cada voz cuenta.

Su compromiso con la defensa de los derechos y el bienestar de sus comunidades es inquebrantable. Al salir a respaldar las decisiones colectivas, Ermes Pete no solo reafirma su rol como representante, sino que también promueve un modelo político más cerca de la gente.

"Acá estoy peleando por mis hermanos que están en los territorios", dice, evidenciando su conexión constante con las realidades de los pueblos ancestrales y desafíos que enfrentan las comunidades en su vida diaria.

Aunque ha anunciado su retiro de la contienda electoral, Vivas deja claro que su lucha por una transformación democrática y auténtica del país no termina aquí.

"Haré un ejercicio abierto, pero contundente de la defensa de mis comunidades", añade, lo que subraya su determinación de continuar trabajando por el cambio desde las calles y la plaza pública. Su gestión se erige como un faro de esperanza para muchos, demostrando que la política puede ser un vehículo de justicia y equidad cuando está fundamentada en los deseos y necesidades de la gente.

En resumen, Ermes Pete Vivas personifica una nueva forma de hacer política, donde la comunidad es el verdadero protagonista y sus decisiones son sagradas. Su legado será recordado no solo por su labor en la Cámara, sino por su firme convicción de que el poder debe emanar del pueblo y estar al servicio de sus intereses.