Víctor Armero: Un líder genuino que emerge desde las raíces del Cauca

Hace unos días, mientras compartíamos un café con Víctor Andrés Armero Hernández, actual diputado de la Asamblea Departamental del Cauca por el partido Alianza Verde, nos relató con orgullo y humildad sus inicios en Argelia, Cauca, un municipio donde la vida no es fácil.

Víctor Armero: Un líder genuino que emerge desde las raíces del Cauca

En una región marcada por la violencia, los grupos ilegales y la ausencia del Estado, Armero creció enfrentando dificultades económicas y un entorno hostil. Sin embargo, su historia no es solo un reflejo de adversidad, sino de cómo un hombre de origen humilde puede transformarse en un líder genuino, comprometido con su comunidad.

Víctor nos habló con nostalgia de una persona que ambos respetamos y admiramos, de Carlos Iván Adrada, un líder político y social muy querido en el Cauca, a quien extraña profundamente y considera un amigo que marcó su vida. Fue Aguilar quien, reconociendo su potencial, lo motivó a dar sus primeros pasos en la política aspirando al concejo de su municipio. "Personas como Carlos, que hacían política de manera decente, son las que hoy extrañamos en el departamento", nos dijo con una mezcla de admiración y melancolía. Ese empujón inicial fue clave para que Armero comenzara una carrera que lo llevaría mucho más lejos de lo que imaginaba.

En un contexto donde la politiquería y los intereses personales suelen dominar, Víctor Armero logró destacarse. Tras ser concejal, su perseverancia y conexión con la gente lo llevaron a obtener una curul como diputado en la Asamblea Departamental del Cauca. Su ascenso no fue sencillo: venir de una zona donde la presencia del Estado brilla por su ausencia y los grupos ilegales imponen su ley requiere no solo valentía, sino una visión clara de servicio. Armero ha demostrado que es posible abrirse paso en la política sin perder de vista los valores ni las raíces.

Lo que hace especial a Víctor es su autenticidad. Al llegar a las esferas del poder, no se le ha olvidado quién es, de dónde viene ni a quiénes sirve. Su casa en Popayán se ha convertido en una especie de refugio para quienes llegan a la ciudad sin recursos para sostener su estadía. Junto a su esposa y su familia, Armero acoge con generosidad a estas personas, ofreciéndoles un techo y apoyo. "Es una casa de paso para miles", nos comentó, y ese gesto, poco común entre políticos, explica por qué sigue contando con el respaldo de tanta gente.

Durante nuestro café, nos compartió una frase que resume su filosofía de vida y que nos arrancó una sonrisa por su sencillez y profundidad: "Si yo raspando coca me ganaba 2 millones y vivía bien, ahora que me gano 15 millones como diputado, me sobran 13 para ayudar a quien más pueda". Con ese humor característico, Víctor reveló el secreto de su éxito: no se trata de acumular riqueza, sino de usarla para beneficiar a los demás, especialmente a los más vulnerables.

Víctor Armero no es solo un político de palabras; sus acciones hablan por él. Como diputado, ha sido un defensor incansable de la justicia, la paz y los derechos de los más desfavorecidos. Su compromiso con los líderes sociales y su crítica a la violencia que azota al Cauca lo han convertido en una voz respetada. Para él, el servicio público es una herramienta para construir un futuro mejor, no un medio para el beneficio personal. 

Con su trayectoria y pasión por servir, Víctor Armero se perfila como un candidato ideal para aspirar a la Cámara de Representantes por el Cauca. En un departamento donde el vacío de liderazgo es evidente, como dice el refrán, "la cura salió peor que la enfermedad", su figura representa una esperanza. La política colombiana necesita más líderes como él: genuinos, cercanos y comprometidos con transformar vidas desde la decencia y la empatía.

Víctor Armero no es solo un diputado; es un ejemplo vivo de que, incluso en los contextos más difíciles, el liderazgo auténtico puede florecer. Su historia nos recuerda que el verdadero poder está en servir a los demás, y su camino apenas está comenzando.