El informe de rendición de cuentas 2024 de la CRC, bajo la dirección de Amarildo Correa, ya genera cuestionamientos

CRC: entre cifras cuestionadas y una gestión ambiental desconectada del territorio

El informe de rendición de cuentas 2024 de la CRC, bajo la dirección de Amarildo Correa, ya genera cuestionamientos

La audiencia pública de rendición de cuentas de la Corporación Autónoma Regional del Cauca (CRC) se llevara a cabo el próximo 28 de abril del 2025, es decir, al límite del plazo legal. Este hecho en si mismo ha generado cuestionamientos sobre la planeación y el cumplimiento del deber legal de transparencia por parte de la entidad.

Las diversas reacciones ciudadanas y llamado la atención de actores sociales y ambientales. Según documentos públicos y versiones recogidas por veedurías, el Informe de Gestión 2024 contendría aparentes inconsistencias entre los indicadores reportados y la realidad ambiental del departamento.

La rendición de cuentas es una obligación legal de todas las entidades públicas en Colombia, sustentada en normas como la Ley 1757 de 2015, el CONPES 3654 de 2010 y el Manual Operativo del Modelo Integrado de Planeación y Gestión (MIPG). Este proceso tiene como fin garantizar la transparencia, el diálogo con la ciudadanía y la responsabilidad institucional. No obstante, la reciente rendición de cuentas de la CRC.

Señalamientos sobre el contenido del Informe de Gestión 2024

Organizaciones ambientales y ciudadanas han expresado su preocupación por la aparente desconexión entre las cifras reportadas y la situación ambiental real del departamento. Según el informe oficial, varios proyectos muestran ejecuciones físicas elevadas, incluso del 100%. Sin embargo, al revisar la ejecución financiera, los números serían considerablemente más bajos:

  • El proyecto 5.1.5 sobre gestión de calidad del aire reporta una ejecución física total, pero apenas un 10% de ejecución financiera, lo que, según expertos consultados, podría indicar una gestión simbólica o mínima frente a problemáticas estructurales como la contaminación por minería, quemas e incendios.
  • En el proyecto 5.1.3 de gobernanza ambiental, la ejecución financiera apenas alcanzó el 36%, lo cual, según estas fuentes, no se condice con los retos territoriales en planificación urbana y control ambiental.

Fallos judiciales pendientes y medidas por ejecutar

En el informe se reconoce que existen fallos judiciales sin cumplir. Uno de los más antiguos, de 2005, responsabiliza a la CRC del deterioro ambiental del cerro Las Tres Cruces y de fuentes de agua en Popayán. A la fecha, según lo reportado, no se han ejecutado las acciones ordenadas por la justicia, como censos y planes de recuperación ambiental.

Otros procesos judiciales hacen referencia a vertimientos no controlados en quebradas como La Monja, Tejares y El Pastuso, donde, de acuerdo con monitoreos oficiales, se estarían superando los niveles permisibles de contaminantes. Sin embargo, la información oficial clasifica los objetivos como “cumplidos”, lo que ha generado preocupación entre veedores.

Ejecuciones bajas en proyectos clave

  • El proyecto 4.1.3, relacionado con licencias y permisos ambientales, presenta una ejecución física del 0% y una ejecución financiera de apenas 3%, según el informe.
  • Las acciones para gestión ambiental urbana y sectorial tendrían un avance físico del 10%, en un contexto departamental con urbanismo desordenado, escasez de alcantarillado y deficiente manejo de residuos sólidos.

Llamado ciudadano a vigilancia y control institucional

Colectivos ambientales han manifestado que estos datos, aunque oficiales, no reflejan una transformación real de la grave situación ambiental del Cauca. Cuestionan que las cifras sean utilizadas para dar una apariencia de cumplimiento, mientras comunidades continúan enfrentando deforestación, contaminación hídrica, minería ilegal y abandono institucional.

No obstante, desde este medio reiteramos que serán las entidades competentes, en el marco de sus atribuciones constitucionales y legales, las encargadas de verificar la veracidad de la información, la legalidad de las actuaciones administrativas y, si es del caso, determinar si existen responsabilidades disciplinarias, fiscales o penales.

Rendir cuentas exige más que cifras

La rendición de cuentas no debe convertirse en un ejercicio protocolario o de cumplimiento formal. Su esencia está en promover la transparencia, la corresponsabilidad institucional y la protección de los bienes colectivos, especialmente en un departamento como el Cauca, donde los ecosistemas están bajo constante amenaza.

En coherencia con nuestro compromiso periodístico y con el derecho ciudadano a estar informado, compartimos con nuestros lectores el Informe de Gestión 2024 de la Corporación Autónoma Regional del Cauca (CRC). Este documento es la base sobre la cual se sustenta nuestra editorial y análisis crítico sobre la gestión ambiental en el departamento.

Seguiremos ejerciendo control social y promoviendo el debate público con responsabilidad y rigor. El Cauca necesita instituciones que respondan con hechos, no solo con cifras.